Estamos en vacaciones y los chicos deben estar felices. Por eso es importante considerar la idea de designarles una actividad durante las vacaciones. Y que mejor que buscar un lugar accesible de horario y para que su tiempo libre de vacaciones puedan integrarse con otros chicos y aprender cosas productivas para su vida.

Lo ideal es que no desperdicien su tiempo en nada y que aparte de descansar se acostumbren a una vida con responsabilidades. Muchos padres apuntan a sus hijos a clases y deportes después del colegio, hay ejercicios más y menos recomendados en función de la edad del menor.

Está claro que el ejercicio físico es fundamental, es más, su propio cuerpo se lo pide desde que es un bebé: comienzan a gatear, corren, caminan, mueven las piernas, pero para cada etapa de la vida hay un tipo de ejercicio más adecuado. Eso sí, el ejercicio no puede poner en riesgo su salud, debe gustarle al niño y ser divertido para ellos. Además, es recomendable que muevan todos los músculos del cuerpo.

Para niños de entre cinco a seis años se recomiendan más los ejercicios que estimulan la coordinación, el equilibrio,  y una motricidad que en adelante les permita desarrollar cualquier deporte. Por eso muchos médicos aconsejan que el niño no se centre solo en un deporte, sino que vayan cambiando de práctica deportiva.

A partir de los 14 o 15 años se recomienda que el niño vaya adquiriendo una especialización en algún deporte, pero siempre intentando realizar actividades que complementen la riqueza motora.

Son muy beneficiosos durante la infancia ejercicios como la natación, gimnasia, atletismo, baloncesto, fútbol, baile, siempre que muevan todos los músculos.

Por otro lado, se aconseja también que sea un deporte en equipo para que aprendan a socializarse e integrarse y la especialización precoz de muchos niños en deportes como la gimnasia, la danza o el tenis. Hay que evitar que la actividad física sea obligada y contra la voluntad del niño. A menudo los médicos suelen ver lesiones en los niños que son propias de deportistas profesionales tales como la osteopatía de pubis y cargas intensas en la columna vertebral.

Ante todo, debe tomarse el deporte durante la infancia como una formación y una actividad lúdica, no como una actividad de olímpicos ya que en los niños esa carga física y emocional no es recomendable.

Fuente: www.sobretodosalud.com

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Su entrenador personal, Peter Geracimo, reveló de qué se trata esta rutina de 7 minutos, que muchos la consideran milagrosa.

“Toda mi base es empezar desde el núcleo y trabajar hacia la periferia, porque ahí se concentra toda la fuerza y bienestar. No se trata de grandes músculos. El ejercicio debe mejorar nuestras vidas, no estorbar”, señala el profesional a la revista People, para luego pasar a detallar la fórmula los “7 minutos en el cielo”.

En él no hay descansos y se explica desde la lógica de ejercicios continuados, uno tras otro, con solo 10 a 15 segundos para reponerse y hacer el siguiente, publica infobae.com.

PASO A PASO

Primer minuto: flexiones de brazo clásicas.

Segundo y tercer minuto: flexiones de brazos laterales alternadas, un minuto cada una, sobre ambas manos.

Cuarto minuto: flexiones de brazos laterales con a diferencia de que se utilizan dos antebrazos.

Quinto minuto: “plancha plato”, que consiste en recostarse boca arriba sobre la espalda, levantar las piernas, brazos y hombros desde el suelo, sosteniendo las piernas en un ángulo de 45 grados.

Sexto minuto: ejercicio estilo Spiderman, consiste en recostarse boca abajo y levantar brazos y piernas contrarias.

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Es común que les ocurra a las deportistas aficionados que siguen rutinas por su cuenta, pero incluso a las profesionales a veces no siguen las instrucciones de sus entrenadores. Aquí algunos de los errores que debés evitar:

Mala postura: el error más común, ya sea porque querés entrenar más tiempo o cargar más peso .Al perder la postura correcta te hacés daño en la espalda, podés lesionarte los músculos involucrados en el ejercicio, y no quemás la cantidad esperada de calorías.

No hacer calentamiento ni enfriamiento: no se debe empezar a ejercitar en frío, hay que preparar los músculos, y asimismo, hay que enfriarlos una vez terminado el entrenamiento. Esto relaja los músculos y evitan dolores posteriores.

Apurarte: el querer hacer todo rápido hará que te sea más difícil mantener la buena postura, trabajar los músculos correctos y por tanto, estarás más expuesto(a) a las lesiones. Tomate tu tiempo, nada de competir con los compañeros de gimnasio.

Trabajar solo las áreas problemáticas: Si bien hay ejercicios localizados para bajar la barriga, los muslos y demás, tenés que recordar que el peso no adelgaza o desarrolla por partes. Lo ideal es que combines ejercicios cardiovasculares con ejercicios de musculación.

Existen muchos más errores, pero estos son los más frecuentes y sobre todo, los más graves, así es que empezá a replantear tu entrenamiento.

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Los beneficios de la actividad física son muchos sobre todo durante el embarazo cuando el cuerpo de la mujer cambia notablemente. En esta etapa los ejercicios sirven de sostén emocional y brindan a la embarazada un mayor bienestar.

La revista Baby Center te recomienda hacer ejercicios para que puedas llegar en perfectas condiciones al momento del parto.

Para la mejor circulación, podés empezar con un ejercicio básico. Ponete de pie, con la espalda y piernas rectas y las manos en la cintura, elevá los talones del suelo por dos segundos aproximadamente. Hacer dos series de 15 repeticiones. Este ejercicio mejora la circulación en miembros inferiores reduciendo la sensación de pesadez en las piernas y los calambres.

Caminá: ayudará a mejorar el funcionamiento del corazón y te mantendrá en forma sin castigar las rodillas y tobillos. Otra ventaja es que se puede hacer en cualquier lugar, no requiere ningún equipo especial aparte de un buen par de zapatillas deportivas. Es una forma segura de hacer ejercicio durante los nueve meses de espera.

Profesionales recomiendan practicar natación. Foto: duetsportsblog.com

Natación: Los médicos y entrenadores físicos consideran la natación el mejor ejercicio para las embarazadas y también el más seguro. Es ideal porque trabaja los músculos de las piernas y brazos, ofrece beneficios cardiovasculares y permite que la embarazada se sienta ligera en el agua a pesar del aumento de su peso.

Ejercicios aeróbicos de bajo impacto: Una de las ventajas de inscribirte en una clase de ejercicio aeróbico es que te dedicarás al ejercicio en un horario específico y consistente. Inscribite a una clase especial para embarazadas, disfrutarás de la compañía de otras mujeres encinta, y tendrás la seguridad de que todos los movimientos son sanos para vos y tu bebé.

Bailá durante en embarazo sin hacer pirueta y saltos. Foto: sandiegored.com

Bailá: Podés hacer ejercicios beneficiosos para el corazón bailando al ritmo de tu música favorita en tu propia sala. Evitá los saltos y las piruetas.

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La difícil tarea de bajar de peso causa, en algunas mujeres, estrés. La clave esta en hacer una dieta saludable, acompañada de ejercicios y una buena alimentación.

La revista sportlife.es habla acerca de los ’25 alimentos para aplanar el estómago’, y en su artículo menciona los ejercicios que se realiza para bajar la panza, específicamente los abdominales pero que aún así no se consigue bajar las grasas acumuladas en ésta zona.

Si realizaste ejercicios durante todo el invierno y a pesar de eso no comprobás que la zona de la cintura no desaparece, no te escondas, analizá qué es lo que falla en tu plan, y comenzá a alimentarte correctamente, así conseguirás un estómago liso.

Podés combinar un entrenamiento específico para quemar la grasa extra y trabajar la zona abdominal, sumandole una buena alimentación que es clave para afinar la cintura y ayudar a definir los músculos abdominales.

Foto: 1001consejos.com

Cuál funciona mejor: ¿dieta o ejercicios?

Un estudio publicado en la revista Psychological Science, ha encontrado que las personas que piensan que la dieta es más importante para controlar el peso tienden a tener un IMC (Índice de Masa Corporal) menor que los que piensan que es más importante el ejercicio para prevenir obesidad.

El estudio era muy interesante porque participaron 1.200 personas de EE.UU, Canadá, China, Francia y Corea del Sur y demostró que somos más propensos a pasarnos con la comida y ganar peso si confiamos demasiado en el ejercicio.

Otra de las partes del estudio, también, interesante es la reacción ante la opción de comer chocolate sin límite. Las personas que se consideran activas y deportistas piensan que pueden comer más chocolate sin engordar, que las que confían más en la dieta moderada para mantener o perder el peso.

Cintura fina

En casi todos los deportes se trabaja la zona abdominal, y entre deportistas es habitual que los músculos abdominales estén trabajados y fuertes.

Foto: enforma.salud180.com

Sin embargo, muy pocos pueden presumir de unos buenos abdominales, y es que tenemos escondidos los abdominales tras una pequeña capa de grasa de reserva, esperando a que los liberemos algún día.

Esto no es un problema de salud, no es grasa problemática para el corazón y las arterias, y no se puede considerar barriga porque no es grande ni blanda, pero tampoco es un estómago plano de cintura definida.

Te recomendamos lo siguiente:

• Comé despacio, masticá bien los alimentos y con la boca cerrada
• Evitá la ingesta de chicles, sodas o gaseosas
• Mantené la postura correcta al sentarte
• Hacé ejercicios de forma regular
• Procurá no fumar ni ingerir alcohol en exceso
• Reducí los alimentos ricos en azucares simples o grasas

Si la hinchazón persiste y sentís dolores, tal vez pueda haber algunas afecciones más severas que debas recurrir a un especialista.

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