El pan tiene su origen en las primeras épocas de la historia del hombre. Las variedades existentes hoy en día nos permiten elegir desde un pan elaborado de forma industrial a prepararlo una misma en la comodidad del hogar.
Te presentamos algunos consejos útiles que pueden ayudarte a expandir más tú conocimiento sobre este alimento tan rico en propiedades como en historia.
- Los panes artesanos están creados con levadura natural.
- Sólo el proceso de crear dicha levadura lleva más de 10 días y debe ser refrescada (renovada) con frecuencia. Esto conlleva un control exhaustivo y continuado. Cualquier mínimo error o descuido implica la pérdida de la levadura y por tanto comenzar el proceso desde cero.
- Fermentan durante muchas horas e incluso días. Esto crea un sabor y aroma sólo alcanzables con dicho proceso.
- No se les añaden aditivos químicos para acelerar un proceso que sólo se consigue de forma natural.
- Los panes cuecen en hornos de piedra. Esta cocción es la que les aporta un aspecto, sabor y aroma tan particulares.
- Normalmente están amasados a mano. Esto hace que el pan sea fácilmente reconocible por el consumidor final puesto que no hay dos panes iguales.
Otros consejos a tener en cuenta:
- No tostar pan tierno
- El pan no debe de conservarse en bolsas de plástico
- Evitar comprar los panes cuyas cortezas se despeguen con facilidad al apretarlos
- Optar por aquellos panes con corteza relativamente gruesa
- Escoger un pan cuya miga no sea demasiado blanca.