Congelamiento del óvulo: todo lo que tenés que saber

  • Las mujeres que postergan la maternidad debido a que están de lleno en el mundo laboral, hoy pueden optar por la congelación de sus óvulos, un servicios cada vez más en uso en el ámbito de la salud.

    Compartir:

     

    «Desde los 35 años, la capacidad reproductiva de la mujer va decreciendo. El nuevo estilo de vida, los problemas vinculares y aspectos económicos llevan a las nuevas generaciones a un cambio de la estructura familiar. Es así que los hijos se postergan de una u otra manera», dice el portal Salud hoy de paraguay.com.

    La fertilidad puede afectar a la mujer, a partir de los 35 años, y al hombre desde los 45 años, aún con tratamientos de reproducción asistida. Por lo tanto, congelar semen y embriones son prácticas cotidianas entre los tratamientos de «Reproducción Asistida» para la búsqueda de un embarazo.

    La calidad de los óvulos cambia con el paso del tiempo. Las tasas de embarazo con Fecundación in Vitro en mujeres menores de 35 años son de alrededor del 40 por ciento, después de los 40 años bajan cerca del 15 por ciento. Pasados los 43 años la tasa de niño nacido es del 1 por ciento.

    Esto muestra que la capacidad de una mujer para concebir empieza a disminuir a partir de los 35. A los 38 es más riesgoso y a partir de los 40 el embarazo es mucho más complicado. No solo la reserva ovárica es menor sino que también va disminuyendo la calidad de los óvulos, aumentando de esta manera los riesgos de infertilidad y aborto.

    El congelamiento de óvulos es una práctica que comenzó finales de los 80 a realizarse a mujeres que padecían algún tipo de enfermedad que ponía en riesgo su fertilidad. Hoy, mujeres sanas deciden congelar óvulos por motivos estrictamente personales. En ambos casos, la edad es fundamental y se sugiere que lo hagan antes de los 35 años, etapa en la que comienza el riesgo para concebir.

    La conservación de óvulos pareciera ser el método eficiente y seguro para la madre y al potencial hijo. En los casos de mujeres que necesitan postergar la maternidad por razones personal o profesional. A través de esta técnica existen mayores posibilidades para lograr el embarazo, y la edad pasa a un segundo plano, siempre que no haya ninguna enfermedad.

    El procedimiento incluye la estimulación ovárica de acuerdo a cada caso. En el laboratorio se detiene su envejecimiento. Desde 2005 la técnica que se utiliza para el congelado de óvulos es la vitrificación. Existe evidencia de que los resultados alcanzados en embarazos, mediante esta técnica, son bastante similares a los resultados alcanzados con óvulos frescos.

    Es importante concientizar a la población y más específicamente a la mujer, sobre este tema, para que tenga en cuenta la edad para tener un hijo o preservar su fertilidad, ya que buscar tardíamente un embarazo es una dificultad imposible de revertir, incluso con los tratamientos de alta complejidad.

    Compartir:

    Más notas: