Consejos para padres primerizos

  • Guía para los cuidados del bebé

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    Somos novatos y los consejos, a veces contradictorios, nos llueven desde todos los flancos. La mejor de las intenciones de nuestro entorno a veces no es suficiente, e incluso entorpece.

    Nuestro consejo es que quien mejor conoce al bebé son los padres y debemos hacer caso a nuestra propia intuición. Hay que olvidarse de las muchas voces que hay alrededor”, afirma Sara Cañamero, matrona, enfermera pediátrica y directora de Maternatal, un centro pionero en la atención integral de madres y bebés.

    Durante el embarazo nos centramos mucho en la preparación al parto, muy cubierto por la Seguridad Social y los seguros privados, pero luego viene la vuelta a casa. Los bebés no vienen con un manual debajo del brazo y con esta guía online, a la que se puede acceder enwww.maternatal.com, intentamos resolver dudas, y alejar miedos y falsos mitos sobre el cuidado del bebé”, afirma Cañamero quien nos adelanta algunas de esas claves.

    El baño del bebé

    No sabemos cómo sujetarle, cuándo coger la toalla, me faltan manos… ¿me meto la esponja en la boca?

    La solución es siempre el sentido común: preparar todo lo que vamos a necesitar; ventanas cerradas sin corrientes; controlar la temperatura del agua (existen varios dispositivos para hacerlo), 36 ó 37 grados es los correcto; sumergir bien al bebé, que esté cómodo. Debemos limpiar de la parte más sucia a la más limpia, hacer hincapié en los genitales de los bebés y sobretodo en los pliegues, detrás de las orejitas, las rosquillitas que se le forman en las piernas, y fundamental el secado del bebé.

    La cura del cordón umbilical

    Hay mucha controversia y, por tanto, diferentes protocolos para el cuidado del cordón, desde el alcohol, a la clorhexidina, el lavado con agua y nada más. En base a ello, hicimos una revisión bibliográfica junto con la Universidad de Navarra viendo cómo se hace en diferentes culturas, por ejemplo, en algunas se pone sal al cordón para que se seque; o no cortan, el nacimiento en loto le llaman: la placenta sigue unida al cordón umbilical pueden estar siete o 10 días con la placenta al lado.

    Lo que se ha visto es que el único riesgo que hay con el cordón es el riesgo de infección, y cualquiera de las medidas que se tomaba, en los diferentes centros de España: alcohol, clorhexidina, agua y jabón… todos indican que tienen el mismo índice de infección, en todos es bajo, y la caída del cordón, en tiempo, es realmente similar.

    Nos da igual cómo lo curemos lo más importante es que esté seco. Sí damos las señales que indican infección como enrojecimiento o que huela mal.

    A los 5 ó 7 días el cordón se momifica y se cae. No hay que tener miedo, no suele doler, podemos manejarlo; lo único importante es que esté seco.

    El cambio de pañal

    Es algo básico y que vamos aprendiendo con la práctica. Debemos tener cerca lo que vamos a necesitar: toallitas, esponja con toalla, pañal, y debemos limpiar el culito de delante a atrás, de la vulva al ano, para no arrastrar las infecciones hacia el meato urinario; las niñas tienen más riesgo de infección.

    Hay distintas opiniones sobre las cremas.

    Los polvos de talco son dañinos para los bebés; liberan muchas partículas que aspiradas, se depositan en el pulmón pudiendo producir diferentes reacciones inflamatorias.

    Las cremas, en principio, tampoco se deben utilizar. Son espesas, forman una película que no deja transpirar y sólo debemos aplicarlas en caso de tratamiento.

    La ropita

    Los niños tienen un sistema termorregulador inmaduro y, por tanto, tienen tendencia a sufrir hipotermias e hipertermias con mucha facilidad.

    No regulan bien la temperatura y si les abrigamos en exceso podemos provocarles fiebre y deshidratación.

    Se aconseja siempre una prenda más de la que tú usarías en este momento, tanto en invierno como en verano. En invierno, mantita y gorrito; los bebés tienen una cabeza grande y pierden mucho calor a través de ella.

    Imagen: Efesalud.com

    Imagen: Efesalud.com

    El paseo diario

    Debe hacerse desde el primer día. Había la creencia de que no les podíamos sacar hasta que cumplieran un mes, como a los cachorros, pero el bebé puede salir.

    Mientras esté bien abrigado, le viene bien la exposición a los rayos solares; simplemente a la claridad del sol hace que sea capaz de sintetizar la vitamina D .

    Además, en la calle va a recibir diferentes estímulos, tanto auditivos como visuales y a la mamá también le viene bien salir. Es una buena opción hacerlo dos veces al día, mañana y tarde, cuando haga menos frío.

    La lactancia materna

    Dar de mamar es la mejor manera de alimentar a nuestro bebé. Las mamás se tienen que formar antes, porque los bebés sí que nacen sabiendo mamar pero las madres tienen que aprenderlo.

    Durante la gestación se recomienda alguna asesoría de lactancia materna y después en el hospital la van a ayudar. En casa lo mejor es buscar intimidad. El estrés materno es lo que puede interferir en la lactancia y muchas visitas generan, sobre todo los primeros días, mucho estrés. Ahí, el papel de la pareja es fundamental ya que tiene que velar o garantizar ese ambiente propicio para la crianza del bebé.

    El descanso del bebé

    El bebé nace con un ciclo de sueño diferente al nuestro y de eso se dan cuenta las mamás cuando lo tiene en la tripa, durante la noche están más activos y durante el día más relajados.

    Cuando nacen siguen el mismo patrón de sueño durante los primeros días, por la noche parece que les ponen pilas y durante la mañana hacen las pausas de las tomas más largas.

    Esto al principio suele desesperar porque intentamos que el bebé se adapte a nuestro ritmo de vida y, sobre todo, el primer mes las mamás, e incluso la pareja, se tienen que adaptar al ritmo de vida del pequeño, tenemos que ceder un poco: dormir cuando duerma él, empezar a hacer siestas durante la mañana y tomarlo con mucha filosofía.

    El niño irá madurando su sistema nervioso e irá adquiriendo todas las fases del sueño completas hasta dormir del tirón, aunque sí es verdad que hay bebés que les cuesta mucho.

    Para inculcar ese ritmo circadiano, durante los sueños que haga en el día, no vamos a bajar el volumen de la televisión, ni vamos a bajar luces; debemos hablar a un volumen normal, incluso le vamos a tener durmiendo en el salón para que se de cuenta de que es de día, señala la guía.

    Durante la noche el sueño debe ser sin estímulos: cuando le tengamos que dar el pecho lo haremos sin hablarle, las caricias transmiten mucho. Irá aprendiendo poco a poco

    Cómo aumentar el vínculo con el bebé

    El masaje infantil es una manera de transmitir muchos sentimientos. Se está, de hecho, empezando a incluir esta práctica en unidades de grandes prematuros. Si vemos a los mamíferos, lo primero que hacen es chupar a las crías, no solo para limpiar las secreciones secundarias al parto sino que se ha visto que el tacto y contacto a través de la piel estimula y hace que las sinapsis interneuronales se vayan conectando. El masaje infantil ayuda a la maduración neurológica del bebe.

    Los bebes que reciben masajes lloran menos, son más tranquilos y esto proporciona mucha seguridad a los padres. El saber tocar a sus niños, saber que simplemente con su tacto o saber qué masaje puede aliviar un dolor, un cólico les hace sentir más seguros.

    Fuente: Efesalud.com

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