La clave para combatirlas y no tener que cortar el pelo es ir paso a paso. Aquí te contamos todo lo que necesitas saber.
Aunque la única forma de deshacerse de las puntas abiertas es cortándolas, hay muchas cosas que podés hacer para evitar que aparezcan y evitar que sigan subiendo porque eso no está bien.
1. Repensar la forma en que te secás el cabello con una toalla
El cabello es más vulnerable durante el proceso de secado, y aunque sea tentador, cuando estés apurada nunca frotes alborotadamente el pelo con la toalla.
Frotar sólo promoverá más roturas. En vez de eso, aplicá presión exprimiendo suavemente el exceso de agua del cabello con una toalla.
2. Reevaluar la técnica de secado con secador
Si realmente querés prevenir las puntas florecidas, vale la pena dejar que tu cabello se seque al aire natural tanto como sea posible antes de darle aire caliente.
Además, hay que evitar aplicar calor directamente en las puntas. Lo ideal es concentrarse más en las raíces y en los medios. También intentá hacer todo lo posible para secar con aire frío.
3. Bajar la temperatura de la planchita o de la buclera
El cabello alcanza una moldeabilidad óptima a 180° C, por lo que cualquier temperatura más alta sobrecalentará y dañará las fibras capilares.
¿Pero la peor parte? Una temperatura alta está eliminando del cabello lo único que contribuye al brillo, la fuerza, la suavidad y la manejabilidad: la queratina.
Fuente: Elle Argentina.