Aunque los ginecólogos recomiendan a las mujeres no depilarse completamente, porque según los médicos los vellos actúan como protectores contra hongos y virus, muchas mujeres prefieren rasurarse porque se sienten más limpias sin los vellos.
Aquí, algunos tips para tener en cuenta a la hora de la depilación íntima:
- Si tus vellos son largos, utilizá una tijera y recorta un poco cada semana. Comenzá la depilación afeitando los labios mayores, ya que según los especialistas suelen tolerar mejor el afeitado que la zona del monte de venus.
- Más o menos a la semana siguiente, comenzá a dejar una parte de vello corto en tu monte púbico más y más pequeño, recortando y afeitando.
- Si empezás a notar irritación, esperá hasta que desaparezca. Sin embargo, podés experimentar con diferentes cortes, cremas y geles de afeitar, formas de navajas o rastrillos y calidades ropa.
- La irritación puede deberse a que la navaja de afeitar quita la capa exterior de tejido y puede cortar el vello debajo de la línea de la piel, produciendo comezón y vellos encarnados.
- Si usás una máquina de afeitar, usá hojas nuevas cada vez. El vello desafila las hojas muy rápidamente. Si usás una rasuradora eléctrica, asegurate de que sus hojas sean nuevas.
- Utilizá abundante espuma o gel de afeitar. Aplicá una nueva capa de producto después de cada paso con la navaja o rastrillo, para mantener lubricada esta delicada piel. Usá las destinadas a piel sensible y evitá las que contengan mentol o eucalipto (puedes sentir un hormigueo o ardor)
- Una vez rasurada, descartá la ropa ajustada. La piel sensible no tolera ningún roce. No uses ropa cuya tela frote tu vulva, como los pantalones ajustados. Preferí en todo caso boxers, bloomers, vestidos y faldas. Recordá que los elásticos también pueden irritar la línea del bikini.
Fuente: Sexualidad180