No se trata de renunciar al maquillaje, sino de usarlo con intención, resaltando lo que te hace única.
En un mundo donde la autenticidad toma protagonismo, el maquillaje natural se erige como una tendencia que celebra la belleza en su forma más pura. Bajo el lema “menos es más”, esta filosofía apuesta por destacar lo mejor de cada rostro, en lugar de ocultarlo tras capas de productos.
El maquillaje natural busca realzar las facciones y potenciar la luminosidad de la piel. Un primer paso esencial es una rutina de cuidado facial adecuada: limpieza, hidratación y protección solar. Con una piel sana, menos maquillaje es suficiente para lograr un look fresco y armonioso.
Los básicos del maquillaje natural incluyen una base ligera o una BB cream, corrector para pequeñas imperfecciones, y un rubor suave para dar vida al rostro. Las cejas bien definidas y un toque de máscara de pestañas aportan estructura, mientras que un bálsamo o labial nude completa el look.
Este enfoque minimalista no solo resalta la belleza natural, sino que también ahorra tiempo y productos, alineándose con un estilo de vida más sostenible.