- abril 9, 2015
Unicef recordó a Paraguay sus retos pendientes en la protección de la infancia, en un país donde el 33 % de los niños vive en situación de pobreza, según el organismo, que a su vez valoró la iniciativa paraguaya de impulsar una resolución en la ONU para una mayor inversión en ese sector.
Paraguay, como país miembro del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, promovió recientemente la aprobación de una resolución para una mejor inversión por parte de los Estados a la infancia.
El texto exhorta a los países a «reforzar sus sistemas públicos de gestión financiera para garantizar el empleo eficaz y eficiente de los recursos».
Contempla además otros aspectos como el derecho a la identidad de los niños o el trabajo infantil, considerados como algunos de los retos pendientes de Paraguay.
Tras aplaudir la iniciativa en un comunicado, la sección paraguaya del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) señaló que el porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) de Paraguay destinado a la infancia se redujo de un 6 % en el año 2000 a un 5,1 % en 2012.
Según la ONG Plan Internacional, en Paraguay son 400.000 los niños que viven en extrema pobreza y no tienen acceso a una alimentación básica.
La cifra se inscribe dentro de las 710.173 personas que se encuentran en situación de extrema pobreza, según los últimos datos del Gobierno, un 10,5 % de una población total de unos 6,7 millones de paraguayos.
En enero de este año la sección paraguaya de Unicef indicó que el trabajo infantil afecta a unos 450.000 niños y adolescentes, de los cuales la mitad está por debajo de los 14 años.
Según esa misma fuente, el 24 % de los menores de un año no está inscrito en ningún registro, una tasa que se eleva al 35 % en las comunidades indígenas.
Paraguay ingresó en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU el pasado 1 de enero, en medio de las críticas de algunas organizaciones sociales que consideran que el país «realiza acciones contrarias a los derechos humanos». EFE