Pasar largas horas sentadas genera dolor de espalda, cervical y en las piernas, pero una mala postura también tiene impacto en nuestra piel.
Nuestro cuerpo está diseñado para moverse, por eso, cuando se encuentra mucho tiempo en una mala posición, empieza a sufrir.
Los efectos son evidentes, pero el uso excesivo del celular o de la computadora, así como la mala postura en el día a día, también pueden causar efectos en el cutis.
¿Qué problemas ocasiona una mala postura en la piel del rostro?
– La postura cervical incorrecta colabora con la acentuación de la papada y con la aparición de arrugas en el anillo del cuello.
– Mantener la vista fija frente a la luz azul de pantallas hace que empiecen a marcarse líneas de expresión como la arruga vertical del entrecejo.
– Aparición de líneas rift en el contorno de ojos o patas de gallo, y en la frente, a causa del movimiento provocado de los músculos faciales.
– Esa misma contaminación lumínica genera deshidratación y aumento de radicales libres, lo que genera flacidez y opacidad en la piel, entre otros.
Fuente: Elle Argentina.