- junio 4, 2020
Hoy te dejo unos consejos para estas hemorragias nasales que en la mayoría de veces suelen ser inofensivas muy fáciles de controlar.
La nariz posee una gran cantidad de vasos sanguíneos bastante nimios que pueden romperse por algo tan sencillo como un resfriado o un cambio brusco de temperatura (sobre todo en invierno). Aunque también pueden ser provocadas por sonarse la nariz con mucha fuerza, por hurgarse la nariz, por agentes químicos, por hipertensión arterial o por posibles tumores (en los casos más graves).
Es por eso que te traigo estos consejos expuestos en el portal Muy Interesante para que vos los tengas en cuenta:
Colocá la cabeza hacia adelante
Ya sea sentada o de pie, como más cómoda estés, lo primero que debes hacer es inclinar la cabeza hacia delante, porque si lo hicieras al revés, acabarías tragando la sangre producto de la hemorragia. Importante: respira por la boca.
Apretar la nariz
Tras inclinar la cabeza hacia delante, tendrás que pellizcar ambas ventanas nasales a la vez justo debajo del tabique de la nariz con los dedos pulgar e índice. Nos quedaremos así durante un par de minutos. Tras este tiempo soltamos y volvemos a oprimir la zona. Soltamos una vez más y comprobamos si ya se ha detenido con éxito la pequeña hemorragia. Si no es así podemos continuar así con presión constante, comprobando cada 5 minutos si hemos dejado de sangrar y siempre respirando por la boca.
Nunca te suenes
Aunque es nuestro primer impulso, no lo hagas, podrías provocar una hemorragia mayor. Además, evita introducir trozos de cualquier material en la nariz a modo de tapón, pues corres el riesgo de que extraigas el coágulo formado y te vuelva a sangrar la nariz. Tendrías que empezar el proceso de nuevo. Lo que sí podes hacer es colocar una bolsa de hielo o compresa fría a través del puente de su nariz; disminuirá la hemorragia.
La hemorragia paró
Una vez que hemos conseguido cortar la hemorragia, los expertos aconsejan no levantar objetos pesados ni realizar ninguna actividad que requiera cierto esfuerzo físico. Lógicamente también queda excluido sonarse la nariz al menos durante 24 horas.
Eso sí, si te das cuenta de que no consigues detener la hemorragia de la nariz, deberás acudir a un centro médico para que te ayuden a controlar el sangrado.