Un estudio publicado recientemente confirma la asociación de la carne procesada con el cáncer de mamas.
Un nuevo estudio publicado en la revista The European Journal of Cancer proporciona evidencia adicional acerca del riesgo de las carnes procesadas, tras relacionar el consumo de estos alimentos con un mayor riesgo de cáncer de mama.
En un análisis de más de 260.000 mujeres, un equipo de investigadores del Instituto de Salud y Bienestar de la Universidad de Glasgow (Reino Unido) encontró que el riesgo de cáncer de pecho aumentó significativamente para aquellas que consumieron más de 9 gramos de carnes procesadas al día, lo que equivale a alrededor de dos panchos por semana. No se halló ningún vínculo entre la ingesta de carne roja y el riesgo de cáncer de mama, publica el portal Muy Interesante.
Los panchos, el tocino, el salami, los chorizos son algunos ejemplos de carne procesada que fueron modificadas para mejorar su sabor o alargar su vida útil.
Ya en 2015, la Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó en una revisión de más de 800 estudios, que las carnes procesadas aumentaban el riesgo de cáncer colorrectal, mientras que las carnes rojas se consideraban «probablemente carcinógenas» para los humanos.