El consumo de frutas durante el verano ayuda a la hidratación del cuerpo. Además aporta energía y salud al organismo.
La alimentación equilibrada incluye, al menos, cinco frutas y verduras por día. Los zumos son una alternativa ideal para incluirlas a la dieta, tanto si se ingieren entre horas, o como postre.
El portal Abc de España recomienda no enfriar el zumo con hielo porque aumenta el contenido en agua y se puede diluir el sabor y los nutrientes. Además, es preferible que se deje con la piel y que la fruta esté fresca.
Tampoco es recomendable, que al jugo o al zumo, se les agregue azúcar porque las frutas ya poseen un aporte calórico importante. Endulzarlo aumentará sus calorías de forma innecesaria.
Zumos a base de limón o naranja:
Entre las recomendadas están la banana, remolacha, manzana, limón y naranja. Todos los zumos podés hacer con una base de jugo de limón o naranja.
– Energizante: las frutas con más azúcar aportan más energía. Para comenzar el día con más fuerza podés tomar un jugo de banana o uva y remolacha, teniendo como base limón o naranja.
– Hidratante: la sandía y el melón son algunas de las frutas que más contenido de agua tienen. Combiná cualquiera de estas con pepino, tomate, limón o naranja. Te ayudarán a obtener un gran aporte de líquidos. Una propuesta ideal para los días con más calor y sed.
– Mutivitamínico: una bebida que incluya frutas tales como el kiwi, la pera, la zanahoria, el apio y la banana, con zumo de limón o naranja, aporta vitaminas “A”, “C” y minerales tales como potasio, ácido fólico, magnesio y calcio.
– Diurético: todos los zumos aportan agua en gran cantidad, así que cualquiera de las opciones anteriores son válidas para eliminar líquidos. Sin embargo, una excelente opción diurética es la mezcla de piña, pera, apio y pepino, con zumo de naranja o limón.
– Para alargar el bronceado: las frutas y verduras ricas en vitamina “A” como la zanahoria, el durazno, las espinacas, el melón o la manzana, con una base de zumo de naranja o limón, ayudan a prolongar más el color moreno de la piel tras tomar el sol.