¿Qué es Psoriasis? Según el sitio MedlinePlus es una afección cutánea común que provoca irritación y enrojecimiento de la piel. La mayoría de las personas con psoriasis presentan parches gruesos de color plateado-blanco con piel roja y escamosa, que se llaman escamas.
Existen cinco tipos principales de psoriasis:
Eritrodérmica: Es cuando el enrojecimiento de la piel es muy intenso y cubre un área grande del cuerpo.
En gotas (guttata): Se trata de las pequeñas manchas entre rojas y rosadas en la piel que luego van teniendo costras.
Inversa: el enrojecimiento e irritación de la piel ocurre en las axilas, la ingle y entre la piel superpuesta. Esta suele aparecer en las personas que tienen sobrepeso. O aquellas que han bajado de peso y quedó con la piel un poco flácida.
En placa: parches de piel rojos y gruesos cubiertos por escamas de plateadas a blancas. Éste es el tipo más común de psoriasis.
Pustular: ampollas blancas que están rodeadas de piel roja e irritada.
Causas
La psoriasis es muy común y cualquier persona puede manifestar sus síntomas, pero más comúnmente comienza entre las edades de 15 y 35 años. No se puede contraer la psoriasis ni transmitírsela a otras personas. Más bien los estudios refieren que sí se puede transmitir de padres a hijos, ya que la medicina lo entiende como un trastorno aoutoinmunitario, es decir que el sistema inmunitario del cuerpo ataca por error y destruye tejido corporal sano.
Las células cutáneas por lo general crecen en lo profundo de la piel y suben hasta la superficie aproximadamente una vez al mes. Cuando uno tiene psoriasis, este proceso ocurre demasiado rápido y las células cutáneas muertas se acumulan en la superficie de la piel.
Los siguientes factores pueden desencadenar un ataque de psoriasis o hacer que la afección sea más difícil de tratar: Infecciones bacterianas o virales, como faringitis estreptocócica e infecciones de las vías respiratorias altas; aire o piel seca; lesión en la piel como cortaduras, quemaduras y picaduras de insectos. También pueden provocar psoriasis algunos medicamentos, entre ellos antipalúdicos, betabloqueadores y litio. El estrés es un factor que puede provocar el desarrollo de esta afección, además de la poca exposición a la luz solar o el exceso de la exposición al sol y el consumo del algohol.
La psoriasis puede ser peor en personas con un sistema inmunitario debilitado, como las personas con VIH; o aquellas que sufren artritis reumatoidea o se han somedio a alguna quimioterapia.
Síntomas
La psoriasis puede aparecer en forma repentina o lenta. Muchas veces, desaparece y luego se reactiva.
El síntoma principal de la afección corresponde a parches de piel irritados, rojos y descamativos. Los parches se observan con más frecuencia en los codos, en las rodillas y en la parte media del cuerpo, pero pueden aparecer en cualquier parte, como el cuero cabelludo.
Otros síntomas refieren al estado de la piel: piel seca y cubierta con piel descamativa y plateada (escamas); piel levantada y gruesa.
Otros síntomas pueden abarcar lesiones genitales y dolores articulares, como se suelen dar en los hombres. Además, en otras personas se manifiestan mediante el cambio en las uñas; las uñas se vuelven más gruesas y se amarillentan, o se despegan de la piel por debajo. La caspa abundante en el cuero cabelludo puede ser síntoma también.
Pruebas y exámenes
El médico o dermatólogo puede diagnosticar esta enfermedad con una revisión simple de la piel, aunque algunas veces se requiere una biopsia para descartar otros trastornos. Además, si además se presenta el dolor articular, los médicos responsables suelen ordenar una radioterapia para asegurarse un buen tratamiento, que más bien se trata de controlar los síntomas a fin de evitar infección.
Por lo general, el tratamiento implica sólo la aplicación de lociones, cremas y champús para la piel. Es decir, tratamientos locales. Sin embargo, existen afecciones que requieren un tratamiento generalizado de adentro y afuera, que incluyen pastillas o inyecciones que afectan.
Por último, también se suele recurrir a la fototerapia, en la cual se utiliza luz para tratar la psoriasis.
Cuidados
Tomar un baño o una ducha diariamente puede ayudar con la psoriasis. Trate de no frotarse con demasiada fuerza porque esto puede irritar la piel y desencadenar un ataque.
Los baños de harina de avena pueden actuar como calmante y ayudar a aflojar las escamas. Se pueden utilizar productos para estos baños de venta libre o puede mezclar una taza de dicha harina en la bañera con agua caliente.
Mantener la piel limpia y húmeda y evitar los desencadenantes específicos de la psoriasis puede ayudar a reducir el número de reagudizaciones.
La luz solar puede ayudar a que los síntomas desaparezcan, pero tenga cuidado con las quemaduras solares.
La relajación y las técnicas antiestrés pueden servir. Sin embargo, el vínculo entre el estrés y las reagudizaciones de la psoriasis aún no se comprende bien.
Fuente: http://www.nlm.nih.gov