- mayo 20, 2013
Cumpleaños, casamientos: El buen brindis debe emocionar a la gente tanto como al invitado de honor.
Actúa de manera natural: Actúa naturalmente, un brindis debe salir del corazón. Cuando el speech fue muy ensayado y formal no parece genuino. La mayoría de la gente que hace el brindis tiene una guía o algunas notas como ayuda memoria. Si se te queda la mente en blanco busca frases famosas que te inspiren.
Personaliza el discurso: Las bromas hacen que la gente se involucre. Compartí una anécdota con los invitados. Fíjate como está el ambiente. ¿Es un grupo divertido que está listo para reírse? ¿Te parece que el grupo es muy sensible? Ajusta el speech y adaptalo al estado de ánimo de la gente.
No seas tan seria: Algunas personas se enganchan más cuando el brindis es divertido, por esto es muy importante también reírse de una misma. Si tus manos están temblando, habla sobre eso.
Por ejemplo: «Este temblor no tiene nada que ver con el miedo a hablar en público». Este ejercicio te a calmar y a relajar a los invitados.
Mira a tu alrededor: No te centres solo en el homenajeado, sino también a las otras personas que están en el lugar, de esta manera todos se sentirán comprometidos. Si te centras en una sola persona, vas a ver muchos bostezos.
Que sea corto: Un brindis puede durar 30 segundos, pero nunca más de dos minutos. Mucha gente al hacer un brindis se obsesiona con el uso de una anécdota aunque sea larga. ¿Pero qué pasa si el público se retira antes de que hayas llegado a lo más importante de la historia? Mejor corto que aburrido.
* Adaptado de la revista Allure
Myriam Raphael Chase
Asesora de Imagen