La guitarrista paraguaya Berta Rojas anunció su intención de llevar a Europa su monumental gira de homenaje al músico Agustín Pío Barrios, «Mangoré», (1855-1944), con la que ha recorrido ya 16 países y que en América Latina culminará en octubre en El Salvador, donde está enterrado.
La artista comparte «Tras las huellas de Mangoré», el nombre del espectáculo dedicado al compositor y guitarrista paraguayo, con el saxofonista cubano Paquito D’Rivera como invitado, con quien tocará en julio en España, en la que será su primera actuación conjunta en el viejo continente.
«Será en el festival internacional de guitarra de Preter, Alicante, y puede decirse que será el anticipo del desembarco de la gira en Europa, que estamos proyectando para 2015», dijo Rojas a Efe.
Con esa cita en mente, Rojas afronta sus conciertos en Haití, Martinica, Cuba y El Salvador, los países que le restan para completar un espectáculo nacido hace cuatro años, cuando decidió llevar la música de «Mangoré» por las naciones en las que había actuado el gigante de la guitarra.
«La idea me la propuso el salvadoreño Carlos Payés, que es un estudioso de Mangoré. Pensamos que la mejor manera de hacerlo era aportando la mirada de alguien que no fuera del mundo de la guitarra, y así es cuando pensé en Paquito, al que ya le había visto tocar en directo», explicó.
Cuenta Rojas que el cubano, buen conocedor de la música de «Mangoré», se sintió inmediatamente receptivo hacía el proyecto, aunque la paraguaya no se libró de hacerle una demostración técnica.
«Le visité en su apartamento de Nueva York y me hizo tocar la guitarra mientras él improvisaba al saxo, pero en medio minuto supo que lo podíamos hacer», recordó Rojas.
A la interacción de los dos músicos durante la gira, iniciada en 2011, se suman los aportes de los grupos invitados, que tras su actuación se unen a Rojas y D’Rivera, de modo que la música de Mangoré varía en función de cada escenario.
«El dúo lo cerramos siempre con la «Galopera», tema tradicional paraguayo del compositor Mauricio Cardozo, y el concierto con la «Danza Paraguaya», uno de los grandes trabajos de Mangoré, en la que participan esos artistas invitados», explica Rojas.
Reconoce Rojas que «Tras las huellas de Mangoré» no hubiera sido lo mismo sin la colaboración del músico Pinchi Cardozo, hijo del autor de la «Galopera».
«Es el arreglista de cada tema y realiza los arreglos según el programa de cada país. Además fue Cardozo quien añadió los espacios musicales para Paquito, siempre con mucho respeto hacía Mangoré», indicó la guitarrista.
Rojas no oculta su emoción ante el inminente final del periplo, especialmente por el hecho de tocar en Puerto Príncipe el 30 de abril, con las dificultadas organizativas que ello entraña debido a las desgracias sufridas por Haití.
Y por supuesto ante el reto de hacerlo en el Teatro Nacional de San Salvador, la capital de El Salvador, país donde Barrios acabó sus días y es considerado una figura nacional.
Rojas, que tocó una vez su guitarra junto a la tumba de Mangoré, afirmó que le «eriza la piel» cuando piensa que actuará en el Teatro Nacional salvadoreño, donde también tocó «Mangoré».
«Será un momento muy especial, quiero que sea una noche muy especial». añadió.
Sin embargo, ello no significará el final de esa relación que mantiene con Barrios, que en 1932 adoptó el sobrenombre de «Nitsuga Mangoré» como reivindicación de sus raíces guaraníes.
Durante el tiempo que le lleve cubrir sus huellas y a la espera de que fructifique el proyecto europeo, Rojas populariza entre los escolares paraguayos a un músico que nunca fue profeta en su tierra, ya que fue descubierto artísticamente en Argentina y luego reverenciado en El Salvador.
«Hace dos años inicié una gira por los colegios de Paraguay y llegamos a 26.000 estudiantes. Este año queremos llegar hasta los 32.000 para dejar constancia que Mangoré es el embajador de la música de Paraguay», dijo Rojas.
Y en medio de ello no para. Tiene un agitado calendario de actuaciones en países tan alejados unos de otros como Filipinas, Brasil, Suecia o Estados Unidos, todas con Mangoré como inspiración.
«Es el mejor guitarrista y compositor de su tiempo, una honra para Paraguay y para América, que supo captar la esencia y la rúbrica de toda América Latina», dijo Rojas. EFE