La fórmula que los médicos han usado para medir el ritmo cardíaco máximo durante el ejercicio no toma en cuenta las diferencias entre los hombres y las mujeres, dijo el cardiólogo Thomas Allison ante la Sesión Científica Anual del Colegio Estadounidense de Cardiología.
En la reunión, que se celebra en Washington, Allison explicó que por mucho tiempo se ha usado la fórmula simple de «220 menos la edad» para calcular el número máximo de palpitaciones del corazón que puede alcanzar una persona.
Si una persona tiene 40 años de edad, el máximo bajo esa fórmula será 180 latidos del corazón por minuto; para una persona de 65 años el máximo será 144. Muchos médicos la usan para señalar metas de ritmo cardíaco durante el ejercicio de una prueba de estrés.
Después de analizar más de 25.000 pruebas de estrés realizadas en la Clínica Mayo entre 1993 y 2006 los investigadores encontraron diferencias significativas entre hombres y mujeres y desarrollaron una fórmula que toma en cuenta este detalle.
El conjunto de pacientes incluyó hombres y mujeres con edades entre 40 y 89 años que no tenían historial de problemas cardiovasculares.
«La norma que se usa actualmente está un poco pasada de moda», comentó Allison, director de las pruebas de estrés en la Clínica Mayo y el autor principal del estudio.
La nueva fórmula puede ayudar a que la gente optimice sus sesiones de ejercicio y a mejorar la precisión de los resultados de las pruebas.
El estudio comprobó que, si bien el desempeño máximo del corazón disminuye para todos con la edad, esa disminución es más gradual para las mujeres. Como resultado la fórmula convencional sobrestima el ritmo cardíaco máximo que pueden alcanzar las mujeres más jóvenes, y subestima el máximo para las mujeres mayores.
Entre las edades de 40 y 89 años las mujeres deben esperar un ritmo cardíaco máximo de 200 menos el 67 por ciento de su edad. Es decir, que una mujer de 40 años tiene un ritmo cardíaco máximo de 173 latidos por minuto, en tanto que una de 65 puede esperar un máximo de 156 latidos.
Para los hombres, según este estudio, el cálculo debe ser 216 menos el 93 por ciento de su edad. Un hombre de 40 años tendría entonces un máximo de 178, y uno de 65 años puede esperar un tope de 155 latidos por minuto.
El estudio encontró asimismo que los hombres más jóvenes tienen una tasa de palpitación cardíaca durante el reposo más baja, y una tasa durante el ejercicio más alta que las mujeres, y que las tasas cardíacas de los hombres suben de manera más notable y retornan a la normalidad más rápidamente que en las mujeres. EFE.