- febrero 11, 2014
Los escotes palabra de honor, que tienden a caerse; las largas colas tipo sirena, que se enganchan y dificultan los andares; o los tacones imposibles, han sido también protagonistas de la alfombra roja
La alfombra roja de la gala de los Premios Goya ha seguido este año la estela dejada por el resto de citas internacionales y, estilistas, transparencias, escote palabra de honor y trajes a medida, han protagonizado, junto con el séptimo arte, la pasarela del cine español.
“Hay un especialista para todo y cuando tienes un evento de este tipo no hay que dudar”, ha explicado a Efe Estilo Nora Navas, una de las actrices nominadas a mejor actriz protagonista, que al igual que la mayoría de sus compañeras han contado con un estilista, como es norma establecida en las citas internacionales.
Las osadas que han arriesgado y, con bajas temperaturas, han optado por las transparencias, han destacado por encima del resto. Las más espectaculares: Juana Acosta con un Zuhair Murad Coture en tono nude, o Blanca Suárez con un Elie Saab, negro formado por body y acompañado por falda transparente.
“Ha sido difícil escoger, me decidí a última hora, pero en cuanto lo vi, sabía que era este”, ha indicado la colombiana, que quería “algo sexy pero también dramático”.
Suárez en cambio ha optado algo “cómodo, y fresco”, pero también joven, que casara con una ocasión como la alfombra roja, en la que siempre se tiende a ir un “poco más formal”, ha señalado con un recagardo collar de Tous.
Por transparencia también ha optado Michelle Jenner con un Naeem Khan de pedrería y plumas, o Macarena García con un Roberto Cavalli, que también ha contado “con ayuda” (de un estilista), pero que acertó con el primero que se probó.
El azul ha sido uno de los tonos más recurrentes, tres de las actrices nominadas a mejor actriz han optado por este color, en su versión azulón.
Marián Alvarez se lo decía a Inma Cuesta en la alfombra roja: “no lo podía creer, cuando te he visto entrar y he visto a Nora”. La primera iba con un diseño exclusivo de Miriam Ocáriz, la segunda con un Iván Campaña y la tercera de Gabriela Cadena.
La tendencia, del extranjero
Las alfombras internacionales marcan la tendencia de los trajes a medida y es que muchas de las asistentes han llevado diseños realizados en exclusiva para esta ocasión, en el caso de Marián Alvarez hasta los zapatos se los habían hecho a medida. “Voy comodísima, no te lo puedes imaginar”, ha explicado.
Lorenzo Caprile ha sido uno de los más escogidos para realizar este tipo de diseños: Belén Rueda con un largo traje y cola de tul negro y marrón; Marta Etura, en blanco roto y pedrería, y Mar Regueras.
Ese mismo diseñador ha sido el de Macarena Gómez: “Me puse completamente en sus manos, confío en él al cien por cien”, aunque tuvo alguna reticencia con el verde. “Ya sabes, quien de verde se viste, por guapa se tiene”, ha señalado.
Manuela Velasco, con su palabra de honor Dior plateado, ha sido una de las primeras en llegar y también una de las que más flashes ha acaparado: “He tenido ayuda claro, pero en cuanto me lo puse supe que era este”, ha indicado sobre la creación de la mítica casa francesa de aire “new look”
Y ellos…
Los hombres han optado por la discreción, Juan Diego Botto, con un esmoquin de Armani, ha agradecido no “estar sometido a la esclavitud” de los tacones y los vestidos de las mujeres, mientras que Pablo Berguer ha optado por un esmoquin de Martin Margiela, pero acompañado por zapatillas de deporte de charol y camiseta.
“Me gustaron las zapatillas y fui escogiendo el resto”, ha señalado uno de los pocos hombres que se ha atrevido a destacar por encima de la media, como también lo han hecho los consortes de Assumpta Serna con kilt y el de Macarena García, con zorros al cuello.
Una de las más esperadas ha sido Paula Echevarria, que repetía de Dolores Promesas, y que este año “quería algo más de princesita, más romántico”, y ha optado por un azul cielo palabra de honor con cola, hecho a medida, y con joyas de Tous también hechas en exclusiva y a juego con el traje.
Algunas han optado por el negro seguro como Silvia Abascal, con un Stephan Rolland de alta costura, o Ana Fernández, una de las pocas que llevaba pantalón. El rojo también ha estado poco solicitado, solo Aitana Sanchez Gijón con un Lorenzo Caprile, y Terele Pávez de Helena Benarroch.
Los escotes palabra de honor, que tienden a caerse; las largas colas tipo sirenas, que se enganchan y dificultan los andares; o los tacones imposibles, han sido también protagonistas de la alfombra.
“Estos trajes no son para estar cómoda, para estar cómoda te quedas en casa”, ha dicho Ana Belén,seguida de una Aura Garrido que no paraba de subirse el escote antes de cada foto, y de María León subida a unos Lauboutin de infarto.
“Creo que antes de que acabe la noche, pierdo algún dedo seguro”, ha apuntado la actriz embutida en un Lanvin verde esmeralda. EFE