La supermodelo Karlie Kloss, uno de los ángeles de Victoria’s Secret, deslizó por la pasarela algunas de las propuestas.
La influencia celta se dejó sentir hoy en la semana de la moda de Sao Paulo gracias a la propuesta presentada por la firma Animale, que a través de la combinación de tejidos invernales, ofreció un viaje por el pasado y futuro del Reino Unido.
El sonido de las gaitas marcó el telón de fondo de una colección con cierto aire místico basada en los tejidos gruesos y los colores otoñales, especialmente el rojo y marrón, que al final del desfile se vieron eclipsados por la luz del blanco.
A pesar de la variedad de formas, la atención estuvo centrada en la supermodelo Karlie Kloss, uno de los ángeles de Victoria’s Secret, que deslizó por la pasarela algunas de las propuestas de la marca para el otoño-invierno 2014, como un vestido claro con estampados tribales que otorgó un aire cálido a la próxima temporada.
Más allá de los motivos tribales, la inspiración celta de Animale quedó reflejada en esta trigésima sexta edición de la «Sao Paulo Fashion Week» a través del uso de joyas geométricas, renovados kilts, capuchas, mangas de estilo murciélago y pantalones pata de elefante.
En cuanto a los tejidos, la calidad de las lanas, la delicadeza de las sedas y la tradición de los tartanes se entremezclan con prendas de cuero, sobre todo pantalones y faldas, que insuflan a la colección un aire gótico y algo punk, más renovado.
A pesar de la apuesta predominante por las prendas gruesas, basadas en el punto, Animale deja espacio a la seducción gracias al uso de encajes y escotes.
La primera jornada de la semana de la moda de Sao Paulo, que se celebra en el parque Villa-Lobos de la capital paulista, continuó con el desfile de Uma Raquel Davidowicz, que recurrió a doce bailarines para presentar su colección más deportiva, seguido de Tufi Duek y Osklen. EFE