Cuidá el colchón de tu cama para que dure más tiempo. Limpiá de forma adecuada y evitá que se descomponga, trucos para saber cómo hacer.
A la hora de comprar un colchón se debe tener en cuenta ciertas características para evitar futuros problemas en la salud. La inversión en camas, colchones y otros objetos para el hogar son gastos que se realizan una vez en mucho tiempo. El colchón, en especial se debe cambiar cada 10 años.
Las personas que aún se están desarrollando físicamente, especialmente los jóvenes, necesitan un colchón firme para que la columna se mantenga alineada y que a su vez pueda realizar movimientos giros de forma suave. Considerando que llevan una vida activa, el descanso final debe ser reparador.
Cuidá tu colchón con estos trucos de la web Hogar Total.
Evitá que se manchen: las manchas no solo dan un aspecto “poco higiénico” a las prendas y más aún a los colchones. Considerando que las espumas adsorben mucho y los químicos de tintes, barnices o los líquidos calientes como el chocolate pueden adherirse al colchón y manchar permanentemente o dañarlo.
Es importante usar un protector bajo las sábanas para evitar que el colchón se ensucie. En caso de las manchas, después de limpiarlo, dejá que se seque por completo antes de poner las sábanas. Limpia lo más rápido posible para que no sean permanentes.
Limpiá: mantené siempre limpio, de esto dependerá su durabilidad. Aspirá diariamente, de modo a evitar que se llene de insectos, pelo de mascotas y reacciones alérgicas por ácaros.
Evitá los malos olores: la sudoración nocturna, la humedad, el ambiente de la habitación, hacen que comiencen a haber malos olores en el colchón. Para eliminar podés rociar un poco de bicarbonato de sodio en él, déjalo reposar por una o dos horas y luego aspirá.
Volteá de vez en cuando: es un truco que se debe hacer cada cinco meses, para evitar que se deforme. Si dormís siempre de un lado, el colchón ira perdiendo volumen de un lado, si le das la vuelta, podrá tomar su forma original de poco a poco y evitarás aplastar de más la misma zona.
Evitá que los niños brinquen sobre el: los niños adoran hacer esta travesura, evitá esta acción porque solo deformaran los resortes, lo desgastan y se arruinan por competo el colchón.
Aireá: Cuando te levantes, dejá que tu colchón se airee por lo menos 20 minutos. Eso quiere decir que cuando te levantes no hagas enseguida la cama. Luego, pasado los 20 minutos, cubrí con las sábanas o lo protectores propios de la cama.