Frente a la controversia desatada por el anuncio de la OMS sobre la posible relación entre el consumo de carnes procesadas y una mayor probabilidad de desarrollar cáncer colorrectal, la experta mexicana Ruth Pedroza pidió hoy a la población que no se asuste pero que adopte una dieta adecuada.
«El llamado es para que las personas coman sin miedo y de forma variada, con una dieta correcta», señala Pedroza, ingeniera y coordinadora del portal Hablemos Claro, cuyos contenidos sobre alimentos y salud son avalados por la Universidad Iberoamericana de México y el International Life Science Institute (ILSI).
El ILSI es una asociación sin fines de lucro dedicada a la difusión de información científica desde 1978 que cuenta con 14 oficinas en el mundo.
En entrevista con EFE en México Pedroza indicó que con respecto a la ingesta de carnes procesadas «el asunto es disminuir el consumo, no hacerlo cotidiano».
La experta aclara que «para los fumadores la evidencia científica dice que tienen un 80% de probabilidad de desarrollar cáncer de pulmón. En el caso de los alimentos procesados cárnicos es del 17%», puntualiza.
Señala que en materia alimentaria «hasta el agua consumida de forma excesiva puede ser perjudicial para la salud«.
La especialista participa este viernes en el Congreso «Mitos y realidades de la industria de alimentos» que se realizará en el Auditorio Crescencio Ballesteros Ibarra de la Universidad Iberoamericana.
También intervendrán en el foro científicos del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán de México, el Instituto de Biotecnología de la Universidad Nacional Autónoma de México y la Asociación de Tecnólogos Alimentarios de Argentina, entre otras instituciones invitadas, debatirán temáticas relacionadas con los alimentos.
Aditivos, alimentos funcionales y otras materias relacionadas con la salud y la seguridad alimentaria serán analizados por científicos de distintas disciplinas.
Pedroza comenta que para emitir esta recomendación la Organización Mundial de la Salud (OMS) se basó en 800 estudios donde se determinó que «podría haber una asociación con el riesgo de cáncer colorectal y entonces se colocaron a las carnes procesadas curadas: embutidos, jamón, cecina en el grupo uno».
La inclusión en ese grupo significa, según la experta, que «hay suficiente evidencia para pensar o relacionar al producto con el cáncer».
Según Pedroza, hay que leer con cuidado los cuadros que difunde la OMS, porque aunque el tabaco y las carnes procesadas están en este primer grupo, las probabilidades de que efectivamente se desarrolle el cáncer son muy diferentes en un caso y el otro.
La especialista señala que las carnes procesadas puestas en la mira son las que han sufrido un procesamiento donde se encuentran involucrados unos aditivos que se llaman nitratos y nitritos.
«Estos aditivos son necesarios cuando se realiza el procesamiento de la carne porque en estos productos hay un riesgo muy alto de que se desarrolle una bacteria que produce una toxina altamente letal que puede causar botulismo», señala Pedroza.
Además, estas sustancias que se adicionan a la carne están altamente reguladas y su uso sigue cánones muy estrictos.
Existe en la comunidad científica la certeza de que hoy por hoy la industria de los alimentos se encuentra más regulada que nunca.
«El organismo regulador más importante del mundo se llama Códex Alimentarius. Depende de la OMS y la FAO. Ellos convocan a un grupo de expertos de todo el mundo cuando, por ejemplo, una empresa quiere aprobar un edulcorante, un conservador o un aditivo», dice Pedroza.
A las empresas se les pide que demuestren por medio de estudios científicos que el producto que pretenden lanzar al mercado es inocuo. Se convoca a la comunidad científica para que envíe hallazgos que han realizado al investigar de manera independiente sobre los productos.
«Los estudios incluyen pruebas de mutación genética, pruebas con animales, ratas, perros, conejos y monos. En el caso de la inocuidad hacia el cáncer se utilizan monos más con una mayor susceptibilidad para desarrollar cáncer», concluyó la experta. EFE