Ocho minutos, 38 salidas y 28 modelos resumen el vertiginoso y atractivo desfile de Alvarno, que estuvo guiado por la fuerza y la fluidez de los patrones, una dualidad que aflora de la lucha entre la luz y la oscuridad de la saga de «Star Wars», que sirvió de inspiración al diseñador.
Si la popular frase de la película «que la fuerza te acompañe», se tuviera que traducir en la moda, podría encajar en el sello Alvarno, que arma a sus mujeres con creaciones inocentes de gusto sofisticado.
Prendas que ponen en valor la feminidad de la mujer, ideadas para princesas, pero no de cuento de hadas, sino para mujeres luchadoras y valientes como la princesa Leia, creada George Lucas.
Foto: EFE
La lucha entre el lado oscuro y el luminoso de Luke Skywalker, protagonista de la saga, aparece representado en las propuestas plisadas y envueltas en un halo de ilusiones ópticas bicolor, blanco y negro, amarillo y verde o rosa y magenta.
De estos plisados, Arnaud Maillard y Álvaro Castejón, alma y cuerpo de la firma Alvarno, han construido una colección en la que conviven los patrones geométricos con las líneas fluidas guiadas por los destellos de luz que emitían los piedra y abalorios a modo de espadas láser.
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En contraste a estas coloridas estampas, Alvarno vuelve a recuperar su estampado de leopardo que tantas «satisfacciones nos ha dado», señalaron hoy a Efe los diseñadores, que dibujan el rostro de Darth Vader sobre camisetas, sudaderas y un mágico chaleco azul marino tallado con 8.000 cristales.
El desfile llegó a su clímax con una serie de prendas bordadas como si fueran cuadros impresionistas, prueba de ella ha sido una fabulosa capa conjuntada con top y falda negro, un conjunto que, como otros, se completaba con unas largas espinilleras de tul, algunas salpicadas con coquetas flores de colores.
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El oro y la plata de los robots R2-D2 y C-3PO de la mítica saga han iluminado vistosos complementos como pendientes largos, brazaletes y gargantillas firmadas por HVEN.
Y para cerrar el desfile, este dúo creativo, que también desfila en la alta costura de París con la firma Azzaro, sorprendió con un luminoso vestido largo que escondía luces de colores, que bailaban al son de la mítica banda sonora que John Williams compuso para «Star Wars».
«Hay que completar el pasado sin arrepentimientos, el presente sin debilidad y el futuro sin ilusiones», decían los Alvarno parafraseando al poeta francés Louis-Philippe de Ségur, una frase que sintetiza la colección y el espíritu de la saga, que estrena su séptima entrega a finales de este año.
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Un estilo muy diferente al de Juan Vidal, con una propuesta guiada por el lirio, los estampados tropicales, las rayas y la gráfica publicitaria asiática para una larguísima colección femenina que respondía a la premisa de «cómo vestir para no vestirse» en un verano caluroso.
La estética del cine de los años 30 y 40 junto con la personalidad de la afamada modelo Hiroko Matsumoto, la primera asiática que desfiló en París, sirvieron a Vidal para recrearse en patrones que hablan de «la libertad de la mujer, el hedonismo y una estética playera desinhibida».
Esta colección es la primera vez de muchas cosas para Vidal. Además de estrenarse en la moda de baño, es la primera vez saca un colección de bolsos, la primera vez que se atreve con el encaje y la primera que utiliza la seda en todas sus versiones. EFE
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