2015 cargado de ilusiones, promesas de cambio y… nuevas tendencias. El fondo de armario experimentará su cíclica revolución con la llegada de una nueva hornada de propuestas, que marcarán los colores, siluetas y prendas imprescindibles para vestir los próximos doce meses.
– Pendiente soltero: Las joyas no abandonan su estilo recargado y barroco. La pasarela manda llevar un único pendiente de grandes dimensiones, con dignidad y en soltería. En resumen, con uno solo basta, y cuanto más grande mejor.
– Ganchillo: El ganchillo es este año la medida más eficaz contra el caluroso verano. Vestidos hechos en delicado hilo, camisetas que juegan a esconder y enseñar, regirán las tendencias de los meses más calurosos.
– Flecos. Los aires “hippy” y “country” se instalan en bolsos y chaquetas y la década de los veinte se resiste a abandonar faldas y vestidos, rematados con flecos que acompañan el movimiento del cuerpo.
– Los setenta están aquí. Color, futurismo y minifalda. Estas son las claves para entender la estética de una época, que vuelve a subirse a la pasarela en clave sofisticada como Valentino o roquera como Vuitton.
– Zapatillas blancas: ¿Jugamos? Si Chanel puede acompañar sus clásicas y conservadoras propuestas de pasarela con deportivas, quién ha dicho que la zapatilla blanca no pueda acompañar el más look más sofisticado.
– Gabardina: El comodín de los cambios de estación. En clásico camell o explosivo magenta, vuelve aupado por la estética de los setenta, y con estructura desmontable como novedad.
– “Gingham”. El mantel de cuadros, al armario. Este tipo de estampado adopta una ecléctica paleta de colores, del tradicional rojo cereza a los tonos flúor, para imprimir a la primavera un aire “country” y “sesentero”.
– Pantalones deportivos. De tela ligera, cintura y tobillos elásticos, esta cómoda y versátil prenda, ha llegado para quedarse los doce meses en el armario.
– Vestido bohemio. La comodidad de las telas vaporosas y livianas capitaneará las calurosas tardes de verano. Gasas, chifón, crepe de seda y georgette, acompañan el movimiento del cuerpo en vestidos de caída ligera y largo hasta los pies, rematado en cuello a la caja.
– Ante y cuero. Aupado por la influencia de los setenta y del lujo, estos son dos de los materiales imprescindibles los próximos doce meses: gabardinas de cuero, pantalones de estética punk, y faldas de sileta A, de distintos largos.
– Marsala. No es una comida, ni un animal, es el color de moda para los próximos meses, según Pantone. Un rojo vino que viene cargado de sobriedad, mejor con piel bronceada.
– Brilla, brilla, estrellita: Pedrería, lentejuelas y brillos metalizados salen de su reclusión nocturna para salpicar dar luz al resto del día. Brillantina en zapatos con un toque kitsch, pedrería en vestidos de estética medieval y lentejuelas en camisetas de clave sofisticado.
Una modelo presenta una de las propuestas de la firma del Reino Unido Burberry Prorsum para la próxima primavera/verano durante la Semana de la Moda de Londres (Reino Unido).EFE/Facundo Arrizabalaga
– Denim. El pantalón vaquero para mujer cumplió ocho décadas en 2014 sin una sola arruga. El denim ha sido, es y será un imprescindibles del fondo de armario y afronta esta temporada con más vigencia que nunca: cazadoras, americanas, gabardinas y vestidos en azul Índigo vestirán los doce meses y todas las horas del día. EFE