Ejercitar el cuerpo todo el tiempo ayuda a la salud. Por ello, en el breve periodo de descanso durante las fiestas de fin de año, es importante ver con qué rutina de ejercicios continuás.
Año Nuevo, vida nueva. Es el momento de comenzar a planear el entrenamiento del año, en el que deberás incorporar lecciones aprendidas durante el año anterior.
Hacé:
– Un balance del período anterior: analizá si conseguiste los objetivos deseados y si los ejercicios estuvieron bien ejecutados. Si las rutinas fueron las correctas, y si pudiste combinar bien los momentos de ejercicios, alimentación, trabajo y rutina. Una buena idea es anotar en un papel los logros que obtuviste el año pasado y junto a ellos las metas que te propones para este año.
– Considerá las rutinas: tu objetivo es aumentar la masa muscular para lucir más esbelto, musculado y atractivo. Planeá los ejercicios con antelación, a modo de establecer un plan que puedas revisar mensualmente. No vayas al gimnasio simplemente a hacer lo que te dé la gana ese día. (Consultá con tu entrenador)
– La dieta: es parte importantísima y definitoria de los logros en el mundo del ejercicio. En la etapa de ganancia muscular, debés aumentar las ingestas, en lo posible repartidas en al menos seis tomas, y elevar el porcentaje de proteínas, grasas saludables y, por sobre todo, hidratos de carbono.
No debes, por ningún motivo, comer cualquier cosa y sin límites, ya que si haces eso simplemente tu abdomen se hinchará por el exceso de calorías y luego te costará muchos más bajar de peso. Comé más, pero con moderación.
– Aeróbicos: realizar ejercicios aeróbicos es importante, aunque muchos atletas dicen que no es necesario hacerlos en la etapa de crecimiento, ya que los aeróbicos podrían interferir con la creación de masa muscular. Bastá con tres veces a la semana.