El bloqueo de una proteína que se encuentra en un tipo de células llamadas mastocitos podría ser una estrategia terapéutica eficaz para reducir reacciones alérgicas ante algunos medicamentos, según un estudio en ratones divulgado hoy en la revista «Nature».
El experimento, realizado por la Universidad Johns Hopkins en Baltimore (Estados Unidos) y liderado por el investigador Xinzhong Dong, concluye que esta proteína es responsable de diversas reacciones alérgicas con síntomas como erupciones cutáneas, anafilaxia y cambios en la frecuencia cardíaca.
«En nuestra investigación analizamos en ratones mutantes transgénicos cómo los mastocitos liberan histamina y otras sustancias en respuesta a los fármacos utilizados clínicamente», dijo a Efe Xinzhong Dong.
«Encontramos que los mastocitos que no tenían esta proteína receptora no respondían con una reacción alérgica a los medicamentos. Es decir, los ratones mutantes sin esta proteína no mostraban ninguna alergia», dijo Dong.
Los mastocitos son unas células que pertenecen al tejido conjuntivo y se originan en las células madre de la médula ósea, participando en los procesos inflamatorios y alérgicos.
Además, estas células se encuentran en la mayoría de los tejidos del cuerpo y sintetizan y almacenan histamina, una sustancia importante en las respuestas alérgicas, así como heparina, un anticoagulante.
Este grupo de científicos ha demostrado que el receptor, llamado Mrgprb2, que se encuentra en los mastocitos del ratón, es la única proteína implicada en ciertas reacciones alérgicas.
Este receptor en los ratones es el equivalente al receptor Mrgprx2 en los seres humanos, y de este estudio se deriva que sería posible reducir las reacciones de tipo alérgico causadas por fármacos mediante el bloqueo del mismo.
«Ambas versiones, tanto en ratones como en humanos, son proteínas presentes únicamente en los mastocitos que al ser activadas por los medicamentos envían señales a células para que liberen histamina y otros reactivos», explicó Dong.
Los resultados del experimento apuntan a que los ratones que no portaban la proteína Mrgprb2 en sus mastocitos no mostraban ningún síntoma como erupciones cutáneas, anafilaxia o cambios en su frecuencia cardíaca.
Los expertos concluyen que las terapias dirigidas a bloquear la proteína receptora Mrgprx2 en los seres humanos podrían aliviar las reacciones alérgicas ante los medicamentos. EFE