Consejos para lograr el busto perfecto

  • ¿Quien no sueña con tener el busto perfecto? Si bien, las cirugías y los ejercicios hacen el milagro, las mujeres buscan que el busto luzca sexy ante cualquier circunstancia. Mirá lo que podés hacer para ayudar a que los senos se mantengan firmes.

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    Los cambios hormonales y los cambios de peso hacen que la piel del busto se vuelva más vulnerable y pierda la elasticidad de los primeros años de vida, (en especial de la se tenía en la adolescencia).

    A todo esto se le suma la factores hormonales, las malas posturas y en especial el embarazo. Existen tratamiento que reafirman los tejidos y garantizan la elasticidad. ¿Cómo conseguir un escote envidiable?

    A continuación algunos consejos para lograr de la mano de Vanidades.

    Efecto Shock: Al bañarte siempre finalizá con un breve duchazo de agua fría, así tonificarás los músculos del pecho; el agua caliente favorece la relajación de los tejidos. No olvides exfoliar esta zona con regularidad.

    Revitalizá: No apliques cremas que contengan grasas, el busto es una de las zonas con mayor producción de lípidos y podrías tener brotes de barritos. Mejor apostá por un hidratante que preserve las fibras de colágeno.

    Cuidado integral: Conservar un peso adecuado evitara que tu busto se estríe o se ponga flácido, pues los estiramientos de la piel provocan la ruptura de la retícula elástica cutánea. Recordá que los cambios bruscos de peso «pesan más» que la ley de gravedad.

    Masajeá: Para garantizar el efecto de la crema, aplicá mediante un suave masaje circular y ascendente (hasta llegar al cuello), y en el sentido de las manecillas del reloj. Evitá tocar la delicada zona de la aureola.

    La mejor posición: Un sostén de algodón es esencial para darle buena forma al busto deja que tu piel respire. También procurá pararte bien derecha, si dejás caer los hombros tus senos perderán tono muscular eventualmente.

    Rutina efectiva: Los »push ups» son los mejores ejercicios para tonificarlo. De pie y con unas pesas de dos kilos extiende tus brazos hacia el centro y, con lentitud, llévalos a tus costados. Hacé dos rutinas de 10 repeticiones cada una, a diario.

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