La tradición de la Navidad sigue intacta en todo el mundo, las viviendas son adornadas con mucha alegría y eso se ve reflejado en la cantidad de luces y decorativos que tienen las fachadas.
En Estados Unidos conducir por un barrio residencial es deleitarse con las magníficas decoraciones que decoran las fachadas, los jardines y los tejados de las viviendas.
No sólo sirven las luces de colores o las intermitentes que siluetean y cambian el aspecto de la vivienda. Los animales del polo norte como los renos, los osos polares o los pingüinos ocupan su espacio en los jardines o tejados, saludando a todos los que circulan por las calles. Toman presencia mediante muñecos hinchables o de plástico duro que resisten a las inclemencias del tiempo. Desde luego, tampoco falta la figura clave de la Navidad, Papá Noel o Santa Claus, en función del país en el que se encuentre y su séquito de elfos. En todo este jolgorio de adornos navideños también hay sitio para carteles, que felicitan las fiestas de paz y armonía, la estrella de oriente, el muérdago en la puerta.
¿Y qué hay más decorativo en Navidad que la propia nieve? Acá en nuestro país, los hogares se visten de luces y mucha decoración en compañía de nuestro tradicional pesebre de Navidad y las visitas que se hacen entre vecinos compartiendo un delicioso clericó.
Lo cierto es que no todas las luces de Navidad son iguales, transmiten ese sentimiento navideño y nos llena de esperanzas.
Vos, ¿cómo decoraste tu hogar?
Fuente: www.diariodemallorca.es