Causa una sensación de impotencia, tener el rostro grasoso. Claro, no es nada estético lucirlo de esa manera, y es algo que puede llegar a poner histérica a una mujer. La grasitud puede ser producida por varios factores ya sea por la alimentación o por algunos productos que usamos y que no ayuda a fortalecer nuestra piel.

Es importante saber que la gran parte de la gratitud es producida por nuestro cabello, entonces lo primero que tenés que hacer es quitártelo de la cara, atartelo y si tenes flequillo, pone para atrás.

Es también por una cuestión de aseo ya que el rostro que lleva un lindo peinado trasmite limpieza femenina. En segundo lugar, tenes que abrir los poros de la piel, por lo que te aconsejamos que te hagas un baño de vapor, colocando agua caliente en una olla luego tapándote la cabeza con una toalla para que el vapor lo salga (durante 5 minutos).

Luego, lavate la cara y aplícate un exfoliante. Si sos de las personas naturistas, el exfoliante podés prepáratelo vos misma: aceite de oliva (poquito), azúcar o sal y listo.

Luego de quitarte el exfoliante pone un poco de crema humectante o crema para piel grasa. Escarcela bien y luego quitatela.

Este tratamiento hace cada dos o tres días. También utiliza leche limpiadora, tónico Hidratante y una crema nutritiva ya que estas te devolverán la elasticidad de tu piel y por ende evitarás la gratitud.

Fuente: www.prensa-xpo.com

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La presión de hoy en día, puede generar en los jóvenes, un problema alimenticio grave muy difícil de solucionar, si no se detecta a tiempo. La anorexia, bulimia, obesidad, entre otros, son enfermedades que pueden afectar a los jóvenes, el estrés, la presión del entorno, los problemas familiares, los modelos que nos imponen los medios de comunicación.

Es muy importante prestar atención para detectar las señales de alarma que te indiquen que existe un problema en su alimentación y por tanto, en su salud.

Los adolescentes son más vulnerables e inseguros y puede afectarles lo que pasa en su entorno repercutiendo en su salud. Los trastornos alimenticios como la anorexia o la bulimia son más comunes por esta razón entre los jóvenes y esconden problemas emocionales mucho más graves que manifiestan de esta forma.

La anorexia es la enfermedad que consiste en el temor a engordar, ingiriendo cada vez menos cantidades de comida; y la bulimia, se manifiesta en forma de atracones de comida ante situaciones de estrés o nervios que se alternan con ayunos excesivos y vómitos autoprovocados después de comer.

¿Cómo detectar qué existe un trastorno alimenticio?

. Los adolescentes con este tipo de problema evitan las situaciones sociales que impliquen comidas. Salen menos con los amigos, se inventan algún pretexto para no acudir a una comida familiar.

. Su carácter se agria y se vuelven mucho más tristes, se enojan con regularidad y se sienten muy solos debido a que su problema les hace aislarse del resto.

. Su autoestima baja cada vez más y según empeora su enfermedad se van sintiendo peor consigo mismo. Aunque cada vez están más delgados y delgadas, ellos siguen sin verse bien y se frustran por no lograr sus objetivos.

. Respecto a los cambios físicos y estéticos, las personas que padecen este tipo de problemas suelen tener frío a menudo y visten con ropas más anchas.

. También es importante que te fijes cuando come. Si notas que juega en exceso con la comida, la parte en trocitos muy pequeños, deja mucho en el plato o controla obsesivamente las calorías que ingiere pueden ser indicios de que sufre un trastorno alimenticio.

. Si la alarma se ha encendido, es síntoma de que existe un problema, lo mejor es que intentes ayudarle cuanto antes, recurriendo lo primero a un especialista que detecte si de verdad padece un trastorno alimenticio. Si es así, él te aconsejara como actuar según la gravedad de la enfermedad, pero, tene en cuenta, que lo más importante será darle todo tu cariño y que sienta que no está sólo. Además, es aconsejable visitar a un psicólogo ya que, la anorexia o la bulimia esconden problemas emocionales más graves.

Fuente: www.ellahoy.es

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Muchas veces nos preguntamos si los exámenes de rayos X son seguros durante el embarazo, la especialista en genética Kristina Kahl, mediante un reportaje en la revista babycenter expresó que la realización de los exámenes que contengan rayos X, depende de cuánta radiación recibe una embarazada, ya que según la profesional mientras mas radiación, mayor es el riesgo para el bebé.

La salud del bebé, también depende no solo de la alimentación de la madre sino que también de la tranquilidad durante los nueve meses de gestación. Un examen de rayos x consiste en el envío de este tipo de partículas a través de una máquina, las cuales pasan a través del cuerpo.

Las estructuras del cuerpo de mayor densidad bloquearán dichas partículas y se mostrarán de color blanco en la película o pantalla, mientras que otras tendrán un color grisáceo. La realización de este examen variará dependiendo de la zona del cuerpo en que se esté realizando.

Durante el embarazo, la madre debe tener en cuenta ciertas medidas de prevención para evitar que agentes externos perjudiquen el normal desarrollo del embarazo.

Recomendaciones 

Los especialistas indican que es seguro hacerse una placa de rayos X durante el embarazo, ya que emite poca radiación y las probabilidades de que el bebé sufra algún tipo de daños es muy pequeña, pero solo debe ser realizada si es estrictamente necesario.

Lo que se debe tener en cuenta: En la gran mayoría de los exámenes de rayos X, los órganos reproductivos de la madre no están expuestos a la radiación, tales como en la cabeza, las piernas, brazos, dientes, etc. Sin embargo, es importante que se coloque un delantal de plomo y collar para bloquear la radiación que se encuentre dispersa y evitar cualquier tipo de daños. Tomar esta medida preventiva es muy importante, ya que la radiación en un nivel alto puede afectar las células de su bebé y por lo tanto, su crecimiento dentro del vientre materno.

Daños que podría sufrir el bebé: Aunque la probabilidad de que ocurra es muy baja, la exposición a altos niveles de radiación puede producir:

• Aumento del riesgo de que el bebé tenga defectos de nacimiento
• Aumento del riesgo de que el bebé presente algunos tipos de cáncer
• . Debe tener en cuenta que los riesgos de que ocurra son bastante remotos, sin embargo, es importante tomar las medidas preventivas para estar al margen de que ocurran las condiciones mencionadas. Si usted está preocupada por algún examen de rayos X que se haya realizado, consulte con su médico para disipar cualquier duda.

Fuente: www.embarazada.com

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