- junio 27, 2014
“Todos hemos estado ahí. Estás tendida en la cama. Tu pareja está en la ducha. Su teléfono está en el velador al lado tuyo. Te sabés la contraseña. Sería tan fácil mirar un poco sin que él se dé cuenta. Sólo una miradita para saber si podés confiar en él. ¿Qué es lo que haces? Husmear o no husmear, esa es la cuestión”, plantea Daniela Tempesta, Psicoterapeuta estadounidense en un artículo en The Huffington Post recogido por BioBio en dónde señala 4 razones por las que no deberías revisar el celular de tu pareja sin su consentimiento:
1. Es adictivo.
“Revisar el celular de alguien es como rascarte un sarpullido. Pica, entonces pensás que rascandote te dará algún tipo de alivio. Pero, por el contrario, mientras más te rascás más se propaga y más necesitas rascarte”, dijo la especialista. “La mejor política es no rascarte nunca. Incluso si no encontrás nada sospechoso cuando revises su celular, ahora asociarás el acto de revisar con el sentimiento de alivio. Así que cada vez que busques alivio, podrías necesitar la urgencia de husmear en su celular”, alertó.
2. Es una situación en la que siempre perdés
“Si revisás el teléfono o mail de tu pareja, te enfrentás al dilema de lidiar con lo que arrojen tus acciones. Si no encontrás nada, el alivio que sentís rápidamente será reemplazado con culpa y estarás estancada con el incómodo sentimiento de que violaste la privacidad y confianza de la persona que amas y que no ha hecho nada malo”, dijo la experta.
No obstante, si por el contrario encontrás alguna conversación o llamada sospechosa, tendrás que decidir si confrontar a la persona (y admitir, de paso, que viste su celular sin su permiso) o guardarte el secreto mientras te come el remordimiento. “Ambas suenan como situaciones bastante lamentables en la que estar”, dijo.
3. Si querés una pareja en la que puedas confiar, sé una pareja en la que se pueda confiar.
Según Tempesta, “Si sospechás que no podés confiar en tu pareja y revisás sus dispositivos, entonces vos te convertís en alguien en quien no se puede confiar. Tratá a otros de la forma en que te gustaría que te trataran. Si hay una cualidad que valores en tu novio(a), deberías cumplir por tu parte con esta cualidad”.
4. Podrías poner en riesgo otra información confidencial.
“Muchas personas tienen información confidencial relacionada con sus trabajos en sus celulares y computadores. Si estás revisando los dispositivos de tu pareja, podrías provocarle grandes problemas en el ámbito laboral”, advirtió la experta.
A ello, agregó que “En algunas profesiones podría significar una violación a la privacidad o podrías poner en peligro información de salud protegida. ¿Vale la pena poner el trabajo o credibilidad profesional de tu pareja en juego por satisfacer tu curiosidad?”.
De acuerdo a la psicoterapeuta, la próxima vez que te den ganas de revisar el celular de tu pareja ten en mente lo siguiente: “Diferencia si se trata de una simple curiosidad o si se trata de una sensación persistente en tu estómago de que algo anda mal”.
“Es natural que sintamos curiosidad sobre lo que hace nuestra pareja. Tenemos mentes que buscan información. (Pero) También tenemos la habilidad de ejercitar el control de nuestros impulsos y tomar decisiones alineadas con nuestros valores y sentido moral. Si sólo es curiosidad, tomá como algo normal, y luego anclate a tus valores y canalizá, tu fuerza de voluntad”, aconsejó.