Podemos vivir sin comprender todo, se llama fluir. Razones para optar por la lejanía en una situación de conflicto.
“Andá a tu habitación y no vuelvas hasta que no sepas lo que hiciste”. ¿Quién no pasó por un castigo de sus padres? Este típico castigo, que en vez de ayudarnos, a veces sólo sirve para “obsesionarnos” por las situaciones que no comprendemos, obligandonos a pensar en ellas, según Eva Sandoval, en PSYCH-K o Proceso Espiritual con Beneficios Psicológicos, una corriente de la psicología de autoayuda.
“Podemos vivir sin comprender todo, se llama fluir”, afirma la mujer que próximamente dará un taller en nuestro país. “Somos seres Expansivos, aunque la mayoría vivamos entre gigantes de cemento, nos sentimos mucho mejor mirando el mar o un paisaje porque hay expansión frente a nosotros y resuena con nuestro interior. En cambio, creemos que pensando mucho en algo lo resolveremos o comprenderemos pero pronto se convierte en una especie de obsesión”, añade.
Sus consejos para resolver una situación conflictiva:
-Para resolver una situación, alejate de ella, dale espacio, dale expansión para que pueda fluir o el “árbol no te dejará ver el bosque”. Alejate, sobretodo mental y emocionalmente. Recuerda que si estás pensando en algo constantemente tu mente está ocupada y te pierdes la información del presente, es como estar hablando por teléfono y estar comunicando constantemente…no puede entrarte ninguna llamada más, estás “bloqueando” la solución.
-A lo largo de la historia han habido muchos casos de resolución de una situación en el momento de relajarse o de rendirse, como Arquímedes o Poincaré.
-Cada uno ve lo que tiene dentro y por tanto, pueden coexistir varias realidades a la vez. Otra manera de decirlo es que varias personas pueden tener razón a la vez y tratar de convencer no es alejarse emocionalmente sino todo lo contrario.
-Dejar espacio alejándote, te ayudará a ampliar la perspectiva y poder ver la solución.