- enero 30, 2015
Pasaron casi un mes de aquel esperado 2015. De seguro si no estás volviendo de las vacaciones, estás por salir. En esta nota te contamos cómo planear las actividades para tu día a día. Ella habló con dos expertas en el tema, quienes dan los puntos principales a tener en cuenta para trazar las metas del corriente año.
Vivian Urbieta
vurbieta@sd.com.py
“Se debe planificar en base a una visión personal y un estilo de vida deseado, con los objetivos claros, conocer las fortalezas y debilidades de una misma”, así comienza la entrevista con Graciela Ortiz y Andrea Arenas, quienes nos hablan de los puntos principales a tener en cuenta para planear el año.
El ajetreo del trabajo, el cuidado de la casa y los hijos generan estrés. Más aún en las mujeres-madres, y en muchos casos estudiantes, que están cumpliendo los distintos roles al mismo tiempo. Pero así como la vida tiene estos sacrificios, en contra partida, es obligación tomarse tiempo para sí mismo, vacacionar y ser feliz.
Por eso te contamos acerca del “Planeamiento Estratégico Personal”, en el que se utiliza herramientas y técnicas que permiten establecer con claridad los objetivos a alcanzar “lo que facilita, da sentido y permite priorizar las actividades y tareas del día a día”. Debe estar estrechamente relacionado con la felicidad y se debe buscar que cada una de las áreas de la vida finalmente conduzca a ella.
A lo mejor, al querer «armar» lo que sería nuestra rutina, nos detenemos a pensar sólo en lo laboral, profesional o los estudios. Pero hay una buena noticia: estas actividades, según nuestras entrevistadas, no deben ser los únicos enfoques y prioridad.
La diversión, la recreación y el descanso son las principales áreas que se deben considerar en el planeamiento, «el por ciento específico destinado a cada área lo define cada persona según las necesidades y el momento en que una se encuentra en la vida», dicen.
Y lo más interesante: ¿Qué debo llevar en cuenta al planear mi año?
• Establecer objetivos para las diferentes áreas de la vida: profesional, espiritual y relaciones personales.
• Priorizar las actividades según la importancia en sí de ellas, o las que consideremos más necesarias para producir una mejora en la vida. Por ejemplo: si uno de nuestros objetivos es bajar de peso por un tema relacionado a la salud, esto no puede postergarse.
• Si no tenés algo más urgente, lo mejor es avanzar con objetivos de las diferentes áreas.
• Debe ser «planeado» en un lugar tranquilo, donde se pueda reflexionar y determinar el espacio en el día a día.
Planear lo fundamental: «Las relaciones amorosas»
El momento íntimo con la pareja es indispensable. “Si se establecen metas en conjunto y ambos van trabajando para poder alcanzarlas, la satisfacción de ver los resultados es muy grande”, explica Andrea.
Es que se deben llegar a acuerdos, y es en el momento del planeamiento la mejor ocasión para realizarlos, ya que es ahí «donde se fijan los objetivos comunes y es mucho más fácil entender el por qué se hace o deja de hacer alguna cosa”, añade.
Para lograr buenos resultados se debe abarcar las diferentes áreas de la vida y en el caso de las parejas sucede exactamente de la misma manera. Es que no solo se puede planear en cuanto a momentos de distracción y esparcimiento, “sino también en lo profesional, como lo económico”.
Priorizar las actividades depende de cada persona, de los resultados que se quiere alcanzar en cada ámbito y también de los principios y valores que rigen en la vida.
Manejar un «tablero de control”
En el planeamiento estratégico se cuenta con una herramienta llamada «tablero de control» que es para dar seguimiento al plan y reorganizar las actividades en caso de que sea necesario. “El plan debe trabajar para uno y no uno para el plan, debe ser flexible de lo contrario produce muchas frustraciones al no llegar a los resultados y entonces se tiende a abandonarlo”, explica.
En el planeamiento para las mujeres madres, los hijos son la prioridad. Generalmente las actividades deben estar organizadas teniendo en cuenta también sus necesidades. “Un bebé depende naturalmente de sus padres, por lo tanto requiere atención generalmente inmediata. Los hijos adolescentes, si bien ya son más independientes, necesitan control y supervisión constante”, dice.
Para alcanzar los objetivos uno debe conocerse a sí misma, ser perseverante y tener disciplina, «con unas claves de combinación equilibrada entre talento, método y esfuerzo» concluyen las charlistas.
Un nuevo taller de planeamiento a la vista
Graciela y Andrea unen sus conocimientos y talentos en un proyecto que se denominado FELICE, que enfoca las acciones en búsqueda de la felicidad teniendo en cuenta tres pilares: “Ser, Estar y Parecer feliz”.
El primer taller se realizó el 10 de enero en el El Granel, sobre Artigas. Las profesionales encargadas del «Planeamiento Estratégico Personal para el año», comentan que están preparando un segundo taller en febrero, aunque todavía no pusieron fecha, invitan a las personas interesadas en el tema a comunicarse al 0983 353 323.