¿Qué mujer no sueña con hacer lo que ama y conquistar sus sueños? María Asunción, con su emprendimiento gastronómico, demuestra que estar decidida a cumplir metas sin dejar de satisfacer los gustos de su exigente clientela.
Por Nathy Presentado
nathalia-presentado@sd.com.py
«Ser feliz no es hacer lo que uno quiere sino querer lo que uno hace», esta frase se refleja en María Asunción Quiñonez Herrera, una mujer que dedica su vida no sólo a su familia sino a convertir ilusiones en esculturas.
«Desde muy chiquita me gustó la pintura, la artesanía, constantemente realizaba cursos que tengan relación al arte. Mi familia también se dedica a este rubro», cuenta en una entrevista concedida a Ella.
Practicidad, pasión por el modelado, decoración de tortas y su mamá hicieron que María Asunción se llene de ganas y coraje para formar su microempresa: TopCake Porcelana & Azúcar. «Cuando nació mi primera hija tuve que buscar un oficio que pueda desarrollar desde casa», agrega. «Fue así que empecé a explotar mi habilidad con las manos y descubrí poco a poco todo lo que podía lograr en este trabajo. La cocina es otra de mis pasiones», menciona.
Desde 2008, trabaja sobre pedidos, modelados en 3D personalizados en porcelana fría, pastillaje o falso masapan (azúcar). Los detalles para bodas, bautismo, cumpleaños o cualquier evento que sea especial puede llevar un detalle único.
María Asunción también elabora cupcakes, arma y decora mesas de dulces dándole un toque especial y divertido. Y a los que ya tienen una torta hecha, sugiere una terminación con forrado de fondant o también conocida como pasta americana.
«El diseño normalmente lo trae el cliente, si hay algo que agregar le sugiero pero normalmente ya vienen con sus diseños, por ejemplo de caricaturas infantiles. Las parejitas de novios las hago en base a las características de los contrayentes y la profesión que tienen, además el diseño de sus trajes. Cuando es en porcelana trato de usar piedritas y encajes, así puedo plasmar lo más similar posible a los trajes que usan los novios», señala. «Si hay algo que tengo que diseñar me inspiro mucho en base a lo que desea el cliente, si es una caricatura investigo sobre ella, hay veces que hasta me toca ver la película y ver muchas fotos para poder inspirarme en el personaje en si y que salga lo mas similar posible, lo mismo ocurre con la fotografía de los novios», cuenta.
Abrirse paso en el mercado no fue fácil para esta multifacética mujer que trabaja, administra su hogar y vela por el cuidado de sus hijos. Cada día, sueña en un local más amplío y paquetes completos para los eventos.
Agradecida con las facilidades que el mundo contemporáneo otorga, usa las redes sociales para dar a conocer sus productos artesanales. Los precios, las medidas y detalles se encuentran disponibles en la fan page de la microempresa, en Facebook. «Al ver que las personas admiran y gustan de mis trabajos me llena de una satisfacción muy grande, porque significa que pude estampar en la masa lo que esa persona deseaba. No hay nada más lindo que el cliente vaya contento y satisfecho con su pedido», dice.
Mientras el negocio va consolidándose, María Asunción amplia sus conocimientos de gastronomía, satisfecha, al mismo tiempo, al ver reflejados en su trabajo, los sueños de sus clientes.
