- diciembre 5, 2014
Primero talleres de diseños, ahora curso de gastronomía. En el marco de la Reforma Penitenciaria, varias internas recibieron el certificado de “chef” profesional. En Ella te contamos los detalles del evento.
Vivian Urbieta
vurbieta@sd.com.py
La historia comenzó en junio de este año cuando el Ministerio de Justicia en conjunto con el Instituto Gastronómico de las Américas (IGA), planean más oportunidades laborales para las mujeres privadas de libertad del penal del Buen Pastor.
Diez internas, ilusionadas con el nuevo emprendimiento, se inscribieron al curso de “Pastelería y Cocina Profesional”. Tras seis meses de intensivas clases dentro del Buen Pastor, este diciembre las estudiantes recibieron sus certificados de “Chef Profesional”.
La entrega se realizó en un emotivo acto dentro del IGA con la presentación y degustación de los bocaditos dulces y salados, como pan chip, pan dulce, tortas y carne fría; con crema de mostaza, y crema de leche. Las agasajadas estuvieron en compañía de sus instructores de cocina, directivos de las instituciones y familiares.
“No es solo un certificado, es una oportunidad”
La Ministra Sheila Abed dijo que las reformas consisten en dar una herramienta de trabajo a las internas del Buen Pastor, “para que una vez que egresen del penal puedan reinsertarse a la sociedad”.
“Para nosotros es una gran alegría poder entregarles sus títulos de chef a las internas porque constituye el cierre de un círculo virtuoso que hemos iniciado a favor de la rehabilitación de las personas privadas de libertad”, expresó.
Recalca la importancia de formar a las personas que están en contexto de encierro, pero que por sobre todo la sociedad debe considerar de brindar las oportunidades laborales. Por su parte, Federico Scapinni, coordinador Académico del IGA, califica de “exitoso el primer paso de apoyo y cooperación al Estado para la rehabilitación social de las internas ”.
Zulma Centurión, interna del BP: “agradecida con la vida”
“Estoy muy contenta porque esto es un sueño anhelado desde siempre, que por problemas económicos no cumplí. Estoy inmensamente agradecida con los directivos de penal y el IGA que confiaron en nosotras para este emprendimiento”, señaló la chef.
Zulma Centurión es interna del Buen Pastor y madre de seis niños, pero le comentó a Ella que los fines de semanas, visita a su familia, con un permiso especial. Cuenta que antes de ingresar al penal ya elaboraba tortas y bocaditos dulces para eventos, “por eso me prendí al curso cuando anunciaron el ofrecimiento. Logré reforzar mis conocimientos”, enfatizó.
Con este emprendimiento se espera lograr el apoyo de la ciudadanía. Los pedidos, tanto de los bocaditos dulces como los salados, se pueden realizar en la portería del penal del Buen Pastor, sobre Choferes del Chaco casi Mcal López.