El estudio explicaría por qué los niños nacidos mediante cesárea tienen más probabilidades de sufrir ciertas enfermedades como el asma, la obesidad, la diabetes tipo 1 o la enfermedad celíaca.
Un equipo de investigadores del Instituto Karolinska de Estocolmo (Suecia) afirma que la técnica quirúrgica del parto puede dejar una huella en las células madre del recién nacido. El estudio fue publicado en la revista American Journal of Obstetrics and Gynecology.
Según Muy Interesante, los expertos estudiaron las alteraciones epigenéticas (todo proceso de regulación de los genes que no implica cambios en la secuencia del ADN) en las células madre de la sangre del cordón umbilical de 43 niños, de los que 18 de ellos habían nacido mediante cesárea y el resto por parto vaginal. De la misma forma, también analizaron el ADN de 12 lactantes, de los que la mitad había nacido mediante cesárea. Los resultados revelaron diferencias epigenéticas en casi 350 regiones del ADN, incluyendo genes involucrados en los procesos de la respuesta inmunológica y el metabolismo.
Este descubrimiento, según los científicos, explicaría por qué los niños nacidos mediante cesárea tienen más probabilidades de sufrir ciertas enfermedades como el asma, la obesidad, la diabetes tipo 1 o la enfermedad celíaca.
“Los mecanismos biológicos que predisponen a un feto o a un recién nacido para tener mayor predisposición a padecer ciertas enfermedades a lo largo de su vida son complejos y dependen tanto de factores genéticos como ambientales durante los años de formación”, afirma Tomas Ekström, coautor del estudio.
“Durante el parto vaginal, el feto está expuesto a un mayor nivel de estrés, que de una manera positiva prepara al feto para la vida fuera del útero. Esta activación de los sistemas de defensa del feto no se produce cuando el parto es mediante cesárea, lo que podría ser la causa de los diferencias observadas entre los grupos”, aclara Mikael Norman, coautor del estudio.