En el invierno, debajo de los abrigos, se acumula la grasita de las comidas rápidas que comemos. ¿Cómo quemarlo? Las empanadas, las croquetas y todo lo que tenga que ver con fritura hace que nuestro cuerpo tenga esa capa gruesa que no luce en los vestidos al cuerpo o en las blusas. Pero lo más importante debemos cuidar la salud.
Volver a nuestro ritmo alimentario no es fácil. Las salidas con los amigos, experiencias gastronómicas de todo tipo, helados y relajación. Por eso no es de extrañar que nuestra figura luzca un poquito más hinchada, pero algunos cambios de hábito te ayudarán a que vuelva a la normalidad.
Comenzá por aumentar la ingesta de agua y eliminar el alcohol al menos durante dos semanas deja que tu cuerpo pase unas semanas sin alcohol y recibiendo abundante agua, lo ayudará a depurarse. Decile sí a las frutas y vegetales y no a las carnes llenas de grasas o las frituras. Incorpora alimentos naturales y saludables en tu dieta y olvídate de las preparaciones calóricas.
Controla además la ingesta de grasas: embutidos, helados, carnes altas en colesterol, deben disminuir su presencia en tu dieta. Opta por el pescado, y las carnes magras al horno, la plancha o el vapor. Los alimentos diuréticos como la piña, la sandía, el perejil o los espárragos son excelentes aliados para depurar tu cuerpo después del verano.
También te recomendamos consumir tres tazas de té verde diarios, que debido a sus efectos antioxidantes y diuréticos te ayudará a desintoxicar tu cuerpo mucho más rápido.
Fuente: www.nosotras.com