En el verano, los alimentos tienden a descomponerse fácilmente. Tomá las debidas precauciones para evitar que se echen a perder.
Estamos en época de mucho calor. El cuidado de los alimentos como lácteos, carne, frutas y verduras es imprescindible en verano.
Consejos fáciles:
– Cuando llegues a la casa después de hacer las compras, rápidamente guardá los lácteos, la fruta y la carne, y todos los alimentos propios de la heladera.
– Si compraste frutas como banana, separá de los tallos para que no maduren tan rápido. Las naranjas, la sandía y las peras guardalas en un lugar fresco.
– Remojá las cebollas crudas en agua helada por 15 minutos para que no sean tan fuertes -ideal para añadir a las ensaladas o sándwiches-.
En la cocina:
– No es recomendable utilizar aceite usado para freír, puede tener mucha bacteria.
– Para mantener el queso fresco más tiempo, envolvé en papel de aluminio en lugar de papel plástico. Esto ayudará a evitar el moho.
– Para evitar los malos olores del coliflor y el brócoli, añadí un chorrito de leche al agua de cocción y el olor desaparecerá.
– Para recalentar pizza, no uses microondas. Lo recomendable es una sartén a fuego bajo. No te olvides de poner la tapa sobre la sartén para poder derretir el queso.