La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó este jueves sobre el creciente aumento de la obesidad infantil al dar cuenta de un informe que refleja el dramático impacto de las enfermedades no contagiosas.
«Nuestros niños están engordando en todas las regiones del mundo», afirmó la directora general de la OMS, Margaret Chan, en un foro en la sede de la ONU para hablar sobre las políticas oficiales que buscan combatir enfermedades como el cáncer o la diabetes.
Esta preocupación sobre la obesidad infantil, añadió, es una «señal de alarma» que indica que está en camino «un serio problema» sobre la salud mundial, que entre otras consecuencias genera una fuerte carga financiera para los sistemas públicos de salud.
La OMS dio a conocer este jueves un informe que indica que cada año mueren 38 millones de personas por enfermedades no contagiosas, algunas de ellas que pueden evitarse con la suficiente prevención.
«Las políticas públicas de salud deben cambiar desde la cura hacia la prevención, desde una gestión a corto plazo a otra de largo plazo», afirmó Chan en una intervención ante la Asamblea General de la ONU donde se analizó este tema.
Recordó que la historia mundial ha estado marcada por la lucha contra las enfermedades infecciosas, que fueron disminuyendo mientras crecía la calidad de vida.
«Hoy está ocurriendo lo contrario. El progreso socioeconómico de hecho está creando las condiciones que favorecen las enfermedades no contagiosas», insistió, y recalcó que estos males representan «enormes» desafíos para los Estados.
El informe dado a conocer señala que de los 38 millones de personas que mueren anualmente por enfermedades no contagiosas, 14 millones perecen entre los 30 y los 70 años, y de ellos el 85% son habitantes de países en desarrollo.
«Estas muertes prematuras son en gran parte evitables con medidas gubernamentales que reduzcan los factores de riesgo», sostiene el preámbulo del informe, firmado por el director general adjunto de la OMS, Oleg Chestnov.
El informe recoge las respuestas oficiales para luchar contra estos males en 194 países. «No veo una falta de compromiso, sino una falta de capacidad para actuar, especialmente en los países en desarrollo», afirmó Chan ante la Asamblea General de la ONU.
La máxima autoridad de la OMS dijo que las tendencias están generando una «profunda preocupación», especialmente en las poblaciones más pobres.
Al referirse a la obesidad, Chan dijo que se trata de una epidemia que están desarrollándose cada vez más en las últimas tres décadas.
«Las prácticas de la industria (alimentaria), especialmente en la comercialización de comidas no sanas y refrescos para los niños, están jugando un papel importante», insistió.
Lamentó que la comida sana «no es mi asequible ni accesible en vastas partes del mundo el desarrollo». «Desafortunadamente, la comida menos sana es usualmente la más barata y más conveniente», recalcó.
El informe presentado no fija un ránking mundial en cuanto a la mortalidad de las enfermedades no contagiosas, sino que presenta los datos de cada país por separado.
Por ejemplo, en Brasil, el país más poblado de Latinoamérica, el 31% de las muertes se debe a problemas cardiovasculares y el 17% al cáncer. En ese país, la probabilidad de morir por enfermedades no contagiosas es del 19% entre los 30 y 70 años.
En México, un país con altos niveles de obesidad infantil, las enfermedades cardiovasculares representan el 24% de los fallecimientos y el cáncer el 12%, con un 16% de probabilidad de perecer por males como esos entre los 30 y los 70 años. EFE