La líder del Partido Nacionalista Escocés (SNP) y ministra principal del Gobierno de Escocia, Nicola Sturgeon, confesó hoy que tuvo «un conflicto interno» sobre si aparecer en la revista de moda «Vogue» en el Reino Unido, para la que posa en la edición de octubre.
Sturgeon, de 45 años y que siempre lamenta que se la juzga por su imagen, dijo a los periodistas que «tuvo un dilema» sobre si sería útil aparecer en la publicación, donde se la ve con una falda de tubo floreada y un jersey de punto de manga corta.
«Sé que, haga lo que haga, la gente va a hablar de lo que llevo y de cómo está mi pelo, y tal vez podría decidir no involucrarme en eso a ningún nivel», ha declarado hoy.
«O puedo decidir, como hago a veces, que lo transformaré en algo positivo. Muchas de las cosas que hago las utilizo como plataforma para promover a diseñadores escoceses, para convertirlo en una ventaja», explicó.
Sin embargo, la política nacionalista, cuyo partido gobierna en mayoría en Escocia y es la segunda fuerza de oposición en la Cámara de los Comunes, no tiene duda de que la gente «no debería centrarse tanto» en lo que lleva puesto, y señala que «tienden a ser las mujeres».
«Si hubiera un interés general en lo que visten los políticos, fueran hombres o mujeres, entonces no sería tan problemático», reflexionó.
En su entrevista con la revista, Sturgeon abunda en la cuestión de la imagen y afirma que sus colegas varones, aunque a veces sean juzgados por su aspecto, «no lo experimentan de la misma manera».
«Literalmente, cada vez que aparezco ante la cámara, además del comentario sobre lo que he dicho, habrá un comentario sobre cómo tenía el pelo o lo que llevaba», lamenta.
Según la líder del SNP, «a menudo está escrito de la manera más horrenda y cruel».
En la misma entrevista con «Vogue», Sturgeon confiesa que es una persona «hipercrítica» consigo misma.
«Es algo muy escocés, estar pensando siempre que tienes que ser un poquito mejor que los demás para ser suficientemente bueno», manifiesta. EFE