Los estilistas, ángeles de la guarda de Hollywood

  • En la retaguardia de la alfombra roja, un ejército de estilistas lucha para que las celebridades a las que visten conquisten lo más alto de las listas de los más elegantes y aprovechan la percha de las estrellas del celuloide para conseguir nuevos clientes y ellos mismos ganarse un lugar ante los focos.

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    La meca del cine no sólo vende películas, sino también moda y clase. Las actrices que despuntan son encumbradas como iconos de estilo, y su aparición constante en revistas y “blogs” especializados, pueden lograr que su imagen sea una constante también en las carteleras.

    Pero el arte de vestir bien no es un don siempre ligado al de interpretar, y para que los actores y actrices despunten en las galerías de “mejor vestidas” que saturan los medios después de un clásico evento de alfombra roja, los estilistas del otro lado del Atlántico trabajan durante semanas.

    La actriz Emma Stone con el mono de Lancin que triunfó en los Globos de Oro.

    La actriz Emma Stone con el mono de Lancin que triunfó en los Globos de Oro.

    En España, sin embargo, esta figura de “asesor de moda” no está todavía asentada: “Aquí la mayoría de los actores recibe ropa de diferentes ‘showrooms’ o despachos de prensa de marcas y se visten casi siempre sin asesoramiento profesional, muchas veces guiados por sus agentes”, cuenta e Efe Estilo la estilista Blanca de la Hoz.

    El arte de vestir

    Solo en ocasiones excepcionales, como la gala de los Premios Goya o el Festival de Cine de Málaga, algunas de las actrices patrias “cuentan con la ayuda de un estilista, lo que conlleva que no tengan una imagen definida y coherente y que se muestren en público, en presentaciones o ruedas de prensa”.

    Estos “looks”, “muy informales y nada atractivos” contrastan con la imagen “sofisticada y a veces incluso exagerada” de galas como los Goya, opina la estilista española.

    En Hollywood, mientras tanto, los que viven de vestir celebridades, ganan influencia y son portada de revistas junto a los famosos que asesoran, y si las estrellas del celuloide salen en las listas de “mejor vestidas”, los encargados de escoger sus ropajes también ocupan su “ránking” particular de influencia, como el de la revista The Hollywood Reporter, que analiza los veinticinco estilistas más influyentes de la meca del cine.

    Algunos de estos profesionales incluso eclipsan a sus estrellas, como es el caso de Rachel Zoe: la mediática asesora que viste a estrellas como Sofía Vergara o Jennifer Lawrence ha sido protagonista de su propio programa de telerrealidad y sus seguidores en las redes sociales se cuentan por millones.

    Reino de mujeres

    Detrás de los estilismos que arrasan, hay un cerebro pensante predominantemente femenino: “El trabajo de estilista ha sido siempre femenino porque viene del mundo editorial de las revistas de moda, en las cuáles siempre ha sido un ‘staff’ de mujeres” aunque hay “cada vez más hombres” señala De la Hoz.

    De los 25 estilistas más influyentes, solo hay cinco masculinos: Brandon Maxwell por vestir a Lady Gaga, Joseph Casell por las prendas que luce Taylor Swift, Rob Zangardi por los estilismos de Jennifer Lopez, Jason Rembert por los atrevidos “looks” de Rita Ora y Ryan Hastings por el estilo más conservador de Jennifer Aniston.

    “En nuestro país, un claro ejemplo de estupendos profesionales son Jose Juan Rodríguez y Paco Casado, que visten entre otras actrices a Maribel Verdú o Cayetana Guillén Cuervo” opina la estilista española.

    El primer puesto, por un Lanvin

    Petra Flannery, la estilista más influyente según la revista estadounidense, consiguió con el mono de Lanvin, que Emma Stone lució en la última gala de los Globos de Oro, llegar al número uno de la lista.

     

    Petra Flannery, la estilista de Emma Stone y número uno entre “las más influyentes”. Cedida por Réplica Comunicación.

    Petra Flannery, la estilista de Emma Stone y número uno entre “las más influyentes”. Cedida por Réplica Comunicación.

    Flannery, que también viste a Amy Adams, Mila Kunis o Andrew Garfield, “tiene un ojo certero para asesorar a sus estrellas con los ‘hits’ de las pasarelas y disparar su glamour”, opina De la Hoz sobre la americana, que eligió la vestimenta de su actriz insignia en la última edición de los premios Óscar, donde Stone volvió e ser encumbrada entre las mejor vestidas.

    A Flannery, la siguen en el podium de la lista la joven Leslie Fremar, por los vestidos de Julianne Moore, y el dúo formado por Karla Welch y Kemal Harris por los estilismos, con el pantalón como protagonista, de la actriz de “House of Cards” Robin Wright.

    Las actrices son las que centran la mayoría de los flashes con sus vestidos de ensueño en las alfombras rojas, pero algunos hombres han despuntado lo suficiente para que sus estilistas se ganen un puesto en la lista.

    Perchas masculinas

    Los tándem de actor y estilista que triunfan son Bradley Cooper y Ilaria Urbinati, Channing Tatum y Wendi Ferreira o Jared Leto y Micaela Erlanguer, quién también está detrás del traje de perlas que lució Lupita Nyong’o en la pasada gala de los Óscar o el vaporoso vestido verde con el que la actriz de “Doce años de esclavitud” conquistó la alfombra de Cannes recientemente.

    Como la moda no es una ciencia, también hay voces que discrepan: “Me suelen divertir los ‘looks’ de Jared Leto pero en esa ocasión -con el traje azul pastel de la gala de los Óscar 2015- le encontré bastante poco favorecido, resultaba un tanto vulgar el ‘total look’”, opina De la Hoz.

    La estilista Petra Flannery

    Respecto a Nyong’o, la estilista no la encontró “muy lucida con ese famoso vestido de las perlas de Calvin Klein” porque “el diseño era demasiado ostentoso para alguien con un rostro tan dulce y un cuerpo tan aniñado”, dice De la Hoz, que vestiría a la actriz con “un ‘smoking’ de pantalón ligeramente pesquero y unas sandalias escotadas de tacón estilo años 70″.

    Innovar o aburrir

    Jeannan Williams, dentro del top diez de las asesoras de moda más influyentes, y que ha vestido a Naomi Watts o Suki Waterhouse, cuenta a The Hollywood Reporter que la moda en la meca del cine puede ser muy rancia, una opinión que comparte De la Hoz: “No tiene nada que ver con la alfombra roja de Cannes, en la que las actrices francesas siempre deslumbran por su personalidad y se muestran menos ‘editadas’ y más naturales.

    Para la estilista, que alaba el “savoir faire” de Charlotte Gainsbourg “con su melena lacia, su flequillo y siempre tan ‘cool’”, hay patrones que se repiten hasta la saciedad en las alfombras rojas de Los Ángeles.

    Son habituales “los largos imposibles que arrastran por el suelo, los escotes vertiginosos, los brillos exagerados a costa de resultar muchas veces ridículos”, así como “los vestidos de escote palabra de honor y rectos tipo ‘columna’ con joyas de valor incalculable”.

    “Lo más fácil en estos casos es recurrir a firmas prestigiosas de moda y ‘colocar’ a la estrella el vestido más llamativo de su pasarela”, explica la estilista, quien opina que “no se trata de lucir un Chanel o un Dior Alta Costura a toda costa sino de encontrar el ‘outfit’ perfecto para la ocasión, la medida del cuerpo y el estilo de la actriz: no hay que disfrazar, sino vestir”.

    Para reforzar la idea, recuerda una frase de Yves Saint Laurent: “Con los años he aprendido que lo importante en un vestido es la mujer que lo viste”.EFE

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