Si ya estás pensando en volar porque llegan las vacaciones de Navidad tenes que saber que es tan importante elegir la indumentaria apropiada, sobre todo, para viajar en avión. No se trata de ir en chándal pero tampoco de “tiros largos”. Tiene que primar la comodidad sin perder un ápice de estilo.
“Todos queremos estar ideales y más si nos esperan en el aeropuerto a nuestra llegada”, asegura Julio César Muñoz, director de Imagen de Stylecode, quien aporta una serie de consejos en EFE Salud para viajar “absolutamente cómodo” y sin renunciar a un “ápice” de glamour.
Lo que tenemos que tener en cuenta es que vamos a coger un vuelo así que no nos vestimos de gala, los vestidos ajustados los dejamos para cuando estemos en tierra. El objetivo es disfrutar del vuelo y hacerlo lo más confortable posible así que desterramos las prendas ajustadas.
Recuerdo una nota de prensa divertida en la que Lady Gaga en pleno vuelo, tuvo que quitarse un “súper ajustado” vestido porque sus piernas empezaron a hincharse y creo que se llevó un buen susto, pero anécdotas aparte, hay que tener sumo cuidado con el hinchazón de piernas ya que podría preceder a una trombosis venosa profunda, que en ocasiones puede manifestarse durante un vuelo. Por lo tanto , nunca elegiremos para nuestro “look” de vuelo prendas muy ajustadas y más si son de tejidos rígidos.
Hay que optar por telas flexibles y transpirables, lo ideal son los tejidos de fibras naturales como el lino o el algodón. Los tejidos que no permiten la circulación del aire provocan que el sudor se quede en la piel y no resulta muy confortable.
Cuestión de capas
Para afrontar la variación térmica durante el vuelo y, además, si la región de origen es más cálida que el lugar de destino, un buen consejo es vestirse con diferentes capas de ropa.
Podemos empezar nuestro “look” con un top o camiseta sin mangas o de manga corta. Sobre ella te puedes poner una blusa o camisa a la que añades un jersey o chaqueta de punto, gordo o fino, dependiendo de nuestra tolerancia al frío. Para las más frioleras, pueden añadir un chal. Para la parte inferior de nuestro tiempo, las piernas, lo mejor es usar pantalón ancho, recto u otra opción no tan elegante como los leggins.
Renuncia a tus pantalones vaqueros por más que te gusten, después de dos horas pueden convertirse en tu peor pesadilla ya que resultan muy incómodos en un vuelo de larga duración.
Falda, si pero amplia
Para aquellas que no puedan renunciar a la feminidad de una falda , mejor elegir las que sean amplias y largas o también pueden llevar su versión en maxi-vestido.
Si tu destino es un lugar frío, lleva en cabina una prenda de abrigo contigo, si no lo haces, seguro que te acordarás al aterrizar y tiritar ese tramo desde las escalerillas del avión a la puerta de entrada de la terminal, si no tienes un “finger” esperándote.
Evita las medias, panties o calcetines que marquen las piernas y que puedan impedir el flujo sanguíneo. Cuantos menos complementos como pendientes, collares, pulseras, mejor, pensad simplemente en los requerimientos de los controles de seguridad.
Sin embargo, hay un complemento muy recomendable: el pañuelo o “foulard”, perfecto para contrarrestar la atmósfera seca de los aviones y la temperatura de cabina. Te asegurarás que tu garganta viaje protegida.
Aunque te estilicen y queden geniales con tu “look”, deja en la maleta los zapatos de tacón alto o grandes plataformas, piensa que que en caso de prisa, no te ayudarán a correr hasta la puerta de embarque. Descarta sandalias, modelos abiertos y chanclas ya que no te protegen del aire acondicionado durante el vuelo, ni de posibles pisotones en el ajetreo del viaje.
Si no podés vivir sin tacones, te queda la opción de las azafatas de muchas aerolíneas, que suelen tener listos dos pares cuando trabajan, de tacón alto mientras están en el aeropuerto, y de tacón bajo cuando están en el avión.
Evita también los zapatos con cordones o demasiado ajustados, no solo porque los pies se hinchan sino porque, en muchas ocasiones, hay que descalzarse por medidas de seguridad del aeropuerto y te restará tiempo. Tampoco es buena idea estrenar zapatos para viajar.
Una de las prendas más útiles para viajar son las “multi-bolsillos”, que te facilitan llevar a mano documentos personales, tickets de tu equipaje, teléfono o auriculares.
El bolso es más apropiado de tamaño mediano y con bolsillos porque es el tamaño idóneo para situarlo debajo del asiento o en el espacio dedicado al equipaje de mano del avión. Y deja en casa los modelos de bolso delicados y vulnerables, opta por los más resistentes para atravesar los controles de seguridad.
Detalles de importancia
El perfume: Recomiendo que para el vuelo utilicéis una fragancia suave y en una dosis baja. Hay muchas personas con alergia o asma y puede resultar muy molesta una fragancia fuerte.
Otro elemento que no puede faltar es la crema hidratante para rostro y manos. Hay que tener presente que con los cambios de temperatura y con la carga de las maletas, la piel puede sufrir.
Por último, pero no menos importante: el maquillaje. Mejor no usar demasiado, dormirse durante el vuelo suele ser muy frecuente y, al despertar, lo más probable es que la máscara de pestañas quede esparcida por el rostro. Podes optar por un brillo labial, una máscara de pestañas suave, un poco de labial y no mucho más.
Los retoques se pueden en el baño del aeropuerto, mientras esperas las maletas.
Ya estás en destino, divina, “chic” y cómoda. ¡A disfrutar!