Gabardinas de doble botonadura y zapatos clásicos con ligera plataforma fueron algunas de las propuestas defendidas hoy por firmas como Versace, Corneliani o Jil Sander para la próxima temporada de otoño-invierno en la primera jornada de la Semana de la Moda Masculina de Milán.
Los zapatos con plataforma y de cuero negro, marrón y beige fueron la pieza clave de la colección de Donatella Versace.
La diseñadora italiana llevó a esta cita internacional de la moda maletines de cuero, pero también bolsos pequeños de mano para vestir al hombre del próximo otoño/invierno.
Los marrones, los grises y los negros llenaron de color la pasarela lombarda, donde también hubo un espacio reservado al «camel».
Entre sus prendas, sudaderas con cremallera y capucha, y jerséis largos vistieron a modelos que desfilaron solo con medias en tonos azul marino, blanco o marrón.
La encargada de inaugurar la pasarela milanesa fue la firma italiana Corneliani y lo hizo con una colección que desfiló en medio de una escenografía de niebla y copos de nieve que imitaba el invierno.
Los negros, los azules marino y los grises fueron los colores protagonistas, y se alternaron con los morados berenjenas y los verdes apagados.
En cuanto a la ropa, trajes de chaqueta a medida y pantalón estrecho hasta los tobillos fueron las apuestas del director creativo Sergio Corneliani, quien también optó por las gabardinas largas por debajo de las rodillas, con capuchas de pelo, y camisas de cuello alto.
Entre sus propuestas para el próximo otoño/invierno sobresalieron algunos abrigos de doble botonadura y de piel de alpaca suave en tonos negros que se degradaban hasta el gris, desde los hombros hasta la cadera.
Guantes de lana, cinturones de cuero negro y hebillas doradas, y bolsos de asas cortas y de gran tamaño fueron los reyes de los complementos, mientras que, como calzado, esta firma fundada en 1930 en Lombardía apostó por los mocasines y los zapatos con cordones, siempre de cuero negro.
Tras Corneliani, fue el turno de Ermenegildo Zegna, que llevó hasta Milán el bolso bandolera en negro y la gorra de béisbol en verde militar.
El diseñador Stefano Pilati presentó un conjunto de prendas masculinas entre las que predominaban las gabardinas verde militar, largas y con cremallera.
Los plásticos que imitan piel fueron los elegidos para componer esta sastrería masculina, en la que también hubo espacio para los pantalones con elástico en la parte inferior y chaquetas de profundos bolsillos.
Con jerséis mostazas y naranjas, de cuello redondo y con botones hizo su aparición en este excepcional escaparate de la moda la diseñadora Jil Sander.
Sus jerséis de suave cachemir se sucedieron junto con gabardinas largas y cerradas en distintos tonos, que fueron desde los mostaza a los marrones, pasando por los rojo burdeos. EFE