El entrenamiento de obediencia y socialización son esenciales para que un perro no se muestre agresivo. A continuación te dejamos algunas normas esenciales para evitar que un perro muerda a los niños o personas extrañas.
1- No toques nunca a un perro desconocido sin preguntar antes a un adulto de confianza. El adulto sabrá juzgar si el propietario es fiable. En ese caso, pedirá su permiso.
2- No invadas nunca el espacio del perro. Lo mejor es dejar que sea el animal quien se acerque a nosotros y nos olfatee la mano (la palma hacia abajo). Si el perro parece que no quiere saludarnos, entonces debemos dejarlo tranquilo, aunque el propietario o cuidador nos haya dicho que podemos tocarlo.
3- Nunca toques directamente a un perro por encima de la cabeza. Ese gesto puede ser intimidatorio para el animal. Los mejores lugares para acariciar son el lado o la parte de atrás del cuello. La cola y las patas suelen ser partes sensibles y debemos evitar tocarlas.
4- Nunca pongas tu rostro cerca de la de un perro que no conoce.
5- Nunca abraces a un perro. En lenguaje canino, el abrazo no es una muestra de cariño y afecto sino todo lo contrario.
6- Nunca toques a un perro que permanezca atado esperando fuera de un establecimiento o detrás de una verja.
7- Nunca toques o molestes a un perro mientras come o duerme. ¡Puede ser muy peligroso!
9- Nunca le quites a un perro un hueso, pelota o juguete si está jugando con ellos. El animal podría reaccionar mordiendo para proteger lo que considera “suyo”.
10-No pases corriendo, ni gritando o gesticulando exageradamente por delante o cerca de un perro al que no conoces. Eso podría asustar al perro o incluso activar su instinto predatorio, acarreando graves consecuencias.