- septiembre 29, 2021
Analizamos algunas señales claves para distinguir cuando una pareja necesita trabajar sus problemas, de aquellas que deberían decirse adiós.
A veces cuesta asumir que la relación cumplió ya su función en nuestras vidas y hay que buscar otra forma de relacionarse entre los dos. Esto se debe a otra cuestión de fondo:
La vida, las relaciones y los sentimientos son flexibles, evolucionan y cambian, pero sobre todo no aceptamos que es posible que cambie la forma en que nos quieren y queremos.
Esta es una clasificación para que identifiques y trates de evitar esas emociones.
1. Desconfianza: los celos no se pueden evitar, solo hay que saber gestionarlos. La mejor manera es mantener una autoestima sana y tolerar que no es posible pasar todo el tiempo con la pareja.
2. Rutina: la rutina es el brazo armado del amor contra el deseo. Pero el deseo es algo que no se puede encarcelar. Para evitar la rutina hay que ponerle pasión.
3. Irritabilidad: detrás de una discusión siempre hay un conflicto no resuelto en la relación. Por ejemplo: que uno de la pareja quiera tener hijos y el otro no. La única solución es hablar.
4. Desgana: llega un momento en el que pensamos que llegamos a la cima de la relación. Pero hay que recordar que el amor también se gasta y, si no lo riegas, desaparece.
5. Diferencia: Cuando pretendemos anular las diferencias, lo que hacemos es intentar cambiar al otro y ahí surgen todos los conflictos. No podes pretender construir una pareja a tu imagen y semejanza.
Fuente: Glamour.