La compatriota cuenta por los momentos difíciles que le tocó atravesar y que hoy se convirtieron su mayor fortaleza para salir adelante.
Belén Delvalle es el nombre de una mujer fuerte y decidida que nació en la humilde ciudad de Yatytay del departamento de Itapúa y que hoy en día pisa fuerte en Buenos Aires, Argentina.
Tras años de privaciones alcanzó el alto cargo en una compañía internacional que opera en el puerto de La Plata. ÚH acompaña este sinuoso camino, que arranca en sus modestos inicios y hace puerto final en la gerencia de Relaciones Institucionales y Responsabilidad Social Corporativa de TecPlata SA, que representa al gigante International Container Terminal Services Inc. (ICTSI), de origen filipino.
“Mi dilema era estudiar o tener a mi hijo Iván; su padre no se hizo cargo. Como madre soltera, empecé a sortear bastante ya en Paraguay: mi pequeño estuvo internado 45 días en el Hospital Acosta Ñu. Estaba sola, sin trabajo y con la única salida en ese momento para comprar insumos médicos: tuve que empeñar sus sandalias”, narra Belén para el portal de Última Hora.
A sus 21 años, el destino la llevó a Buenos Aires para el servicio doméstico. Las visitas a su Iván entrañable se repetían cada tres meses.
Ahora, ya gerente de una multinacional, está agradecida con su país de adopción y considera que todo lo ocurrido la motivó a seguir superándose. “Cuando decaigo a veces, miro hacia atrás y sé dónde estuve. Siempre doy lo mejor de mí, para no defraudar. Este es un país de oportunidades y el entorno tiene mucho que ver para salir adelante”, sintetiza la compatriota radicada en Argentina.
Su trabajo actual es del de sus sueños, según dice. Allí ya pudo capacitar a gente sin trabajo en los barrios de influencia de la terminal portuaria, mediante cursos para mozos/as, construcción en seco y recuperación de espacios verdes.