- mayo 16, 2014
La obesidad se ha convertido en un problema tan grave como el cáncer y que debería prevenirse desde la infancia, aunque los avances en el tratamiento quirúrgico o cirugía metabólica han hecho posible el control de esta enfermedad y aumentado la expectativa de vida de los obesos mórbidos.
Así dijo a Efe el médico especialista en cirugía metabólica de la obesidad Alfredo Alonso Poza, jefe del departamento de cirugía del Hospital Universitario del Sureste de Madrid (España) y que participa en el XI Congreso Latinoamericano de Vídeo Cirugía que se celebra del 13 al 17 de mayo en Ciudad de Panamá.
Hoy en día, según Poza, tanto los médicos como los cirujanos consideran a la obesidad como «la nueva epidemia del siglo XXI. No nos cabe ninguna duda».
«También se está diciendo ya que la obesidad mórbida es un problema tan importante o más que el cáncer», afirmó.
El cirujano explicó que un obeso mórbido tiene cinco veces más posibilidades que la población general de tener un infarto del miocardio, y si tiene un síndrome o cuadro metabólico con hipertensión, hipercolestorolemia (colesterol elevado de la sangre), calcio en las arterias, lesión renal y diabetes su vida se pondrá en riesgo en los cinco años siguientes.
Aclaró que estos pacientes tienen reducida su esperanza de vida, no por la enfermedad maligna, sino por el síndrome metabólico y por el riesgo de infarto del miocardio.
Por eso es que el galeno español recomienda prevenir desde la infancia este problema para evitar que un niño gordo llegue a adulto siendo alguien «realmente obeso» y que no tenga, como último paso, otra solución a su problema que una intervención quirúrgica.
Lo que sucede en estos casos es que los especialistas establecen que la cirugía está indicada cuando un paciente ya fracasa entre la cuarta y la quinta dieta sucesiva y no pierde peso.
La cirugía metabólica está indicada para pacientes con obesidad severa que tienen asociado diabetes Mellitus tipo II, que se realiza mediante una técnica quirúrgica que modifica el aparato digestivo con la aplicación de un «bypass» gástrico por «videolaparoscopía» para restringir el volumen de alimentos y crear la sensación de saciedad.
La cirugía metabólica también logra controlar la diabetes y disminuir la necesidad de insulina, el colesterol y la hipertensión y aumentar la expectativa de vida, pero es costosa por la tecnología que se necesita.
La tecnología de la que disponen hoy los cirujanos ha ayudado a que la obesidad baje sus índices de mortalidad pre y postoperatorios gracias a un «sistema de sellado de vasos sanguíneos y un sistema de triple grapado con grapas de titanio más seguros», detalló Poza.
Indicó que se ha reducido mucho la mortalidad operatoria de estos pacientes al mismo tiempo que la cirugía se ha hecho más frecuente, logrando que los decesos postoperatorios de un obeso mórbido estén por debajo del 1 %, cuando hace 20 años estaba en torno al 10 % «sin exagerar». EFE