- marzo 31, 2014
Los implantes siguen siendo la cirugía plástica de pechos más popular entre las mujeres, pero desde 2000 han aumentado a ritmo más rápido el número de las que optan por el «levante», según informó la Sociedad de Cirujanos Plásticos de Estados Unidos.
«Muchas mujeres buscan una apariencia juvenil de sus pechos usando el tejido que ya tienen», explicó en una declaración el presidente de la asociación, Robert Murphy.
Según las estadísticas de la asociación de cirujanos plásticos, en el año 2000 los miembros de este grupo llevaron a cabo menos de 53.000 intervenciones de levantamiento de pechos, mientras que el año pasado hubo 90.006 de esas intervenciones, un 70 % más y la primera vez que se superó la cifra de 90.000 operaciones.
El levantamiento de pecho es una intervención quirúrgica que corta y extirpa el exceso de tejido glandular, adiposo y de piel, los ligamentos suspensores estirados y traslada la aréola y el pezón más alto en el hemisferio de la mama.
El implante, o cirugía para el aumento del pecho, sigue siendo el procedimiento más popular con 290.224 operaciones de este tipo realizadas por los miembros de la asociación de cirujanos en 2013. El número representa un incremento del 37 % sobre los implantes efectuados en 2000.
En la cirugía de implante de pechos, que en muchos casos sigue a una mastectomía para la erradicación de un cáncer de mama, se coloca material de relleno que puede ser una solución salina, una gelatina de silicona u otros compuestos para crear o aumentar la masa de los pechos.
«El levantamiento de pechos ha aumentado mucho en mi práctica», indicó en una declaración Ann Taylor, una cirujana plástica en Columbus (Ohio, EE.UU.), quien añadió que «más mujeres buscan el tratamiento después de haber tenido hijos y presentan una disminución del volumen o una caída de los pechos».
Según Murphy la candidata ideal para el levantamiento de pecho es una mujer que tiene una buena cantidad de tejido de pecho y no busca, necesariamente, un implante.
«Muchas mujeres no están seguras de si son candidatas para este tipo de cirugía pero una simple prueba con un lápiz puede darles la respuesta», añadió.
Para llevar a cabo esta prueba una mujer coloca un lápiz debajo de sus pechos y, si queda sostenido, eso indica a los cirujanos que hay una lasitud que puede corregirse con un levantamiento. EFE