- mayo 24, 2014
Del 26 de mayo al 9 de junio se va a impartir un curso online para enseñar a padres e hijos algunas ideas básicas sobre alergias alimentarias. Este programa educativo está dentro del proyecto CESA las reacciones alérgicas por alimentos y es gratuito.
Enseñar a niños y padres algunas ideas básicas sobre la alergia alimentaria, cómo evitar las reacciones y cómo tratarlas si se producen de forma inesperada, aprender a identificar alimentos alergénicos y qué hacer para disminuir el riesgo de reacciones.
Son estas algunas de las soluciones y recomendaciones que ofrece el curso, lanzado por médicos especialistas en alergia e investigadores junto con asociaciones de pacientes.
“El proyecto comenzó hace dos años y su objetivo inicial era comparar el impacto de un programa educativo a través de talleres presenciales en ocho ciudades y a los que acudieron los padres con sus hijos. Este mismo programa se adaptó después a una plataforma online”, afirma Armando Ruiz, investigador de la iniciativa CESA.
“Es una forma de acercar la información a los pacientes de forma sencilla, gratuita y de lo más cómoda”, añade.
La inscripción es gratuita y los interesados pueden hacerlo a través de la web, dentro del apartado curso online-aula virtual. A través de este, las familias de niños con alergia alimentaria grave y riesgo de anafilaxia disponen de unidades didácticas y materiales audiovisuales que se complementan con foros de debate, en las que los participantes podrán intercambiar experiencias y hacer preguntas a los docentes. Los resultados del aprendizaje serán evaluados mediante cuestionarios.
Se darán las pautas para aprender el uso de los distintos dispositivos de tratamiento en caso de que fuesen necesarios, tales como autoinyectores de adrenalina, inhaladores y otros medicamentos que se pueden utilizar para tratar las reacciones, según su gravedad.
Los ingresos hospitalarios por reacciones alérgicas graves en niños se han multiplicado por siete en la última década. En España, en los últimos trece años, la frecuencia de sensibilización a alimentos se duplicó, pasando de un 3,6 a un 7,4 por ciento de la población.
Entre los factores de riesgo para el desarrollo de la alergia a alimentos se encuentran los antecedentes genéticos y familiares, las características de los propios alimentos, así como la exposición ambiental.
Hay que decir que existe una gran diferencia entre una alergia alimentaria y una intolerancia. Las intolerancias no nos van a dar un choque anafiláctico, sino que nos pueden dar problemas intestinales u otros problemas menores. En cambio, las alergias alimentarias afectan al sistema inmunológico y tiene como tratamiento la adrenalina, que acaba con la reacción.
“La adrenalina es el tratamiento rescate”, subraya el investigador.
Medicina participativa
El proyecto está basado en los modelos de medicina participativa, centrada en la persona y coaching para la salud. Sus promotores lo plantean como un modelo de asistencia sanitaria que busca la participación activa de pacientes, profesionales y cuidadores, a través de la cooperación asistencial en temas relacionados con la salud de un individuo.
“Lo importante es la relación que existe entre médicos y pacientes”, asegura el experto.
Añaden que la medicina participativa es también un enfoque de la atención a los pacientes que procura mejorar los resultados de salud, reducir los errores asistenciales, aumentar la satisfacción de los pacientes y optimizar el coste de la atención. La medicina centrada en la persona se dedica a la promoción de la salud como un estado de bienestar físico, mental, social así como la reducción del impacto negativo de la enfermedad.
El coaching para la salud es un proceso que facilita la obtención de objetivos de salud, mediante cambios a un comportamiento más saludable, elegidos por el paciente a través de un plan de acción. Se basa en los principios de la psicología positiva, las prácticas de la entrevista motivacional y el establecimiento de salud acordadas entre el paciente y el profesional sanitario.
Para saber más del curso, clickeá aquí