- marzo 27, 2014
Así decidieron llamar a una especie de tendinitis que, según reseña el diario The Lancet, presentó por primera vez una española de 34 años de edad con un embarazo de 27 semanas que por seis horas ininterrumpidas se dedicó a mandar mensajes por WhatsApp.
El uso excesivo del servicio de mensajería conocido como Whatsapp, ya sea escribiendo o esperando que finalmente nos responda esa persona que está “en línea”, puede ocasionar Whatsappitis.
Así decidieron llamar a una especie de tendinitis que, según reseña el diario The Lancet, presentó por primera vez una española de 34 años de edad con un embarazo de 27 semanas que por seis horas ininterrumpidas se dedicó a mandar mensajes por WhatsApp. Como resultado tuvo fuertes dolores en los pulgares y las muñecas, y se convirtió en la primera persona diagnosticada con “Whatsappitis”. El diagnóstico médico determinó que la tendinitis había sido provocada por sostener tanto tiempo el teléfono mientras usaba el sistema de chat, naciendo así el simpático término.
Como parte del tratamiento, los médicos le indicaron que tomara antiinflamatorios y que dejara de usar el teléfono por un tiempo.
Puede resultar extraño y hasta ridículo, pero no es la primera vez que el uso de un artefacto tecnológico desarrolla alguna dolencia. En 1990 la revista médica The New England Journal of Medicine publicó un artículo sobre la Nintendinitis, surgida por los dolores que sufrió una mujer de 35 años por jugar Nintendo durante cinco horas.
En 2007, un hombre de 29 años sufría un caso de wiitis aguda tras pasar muchas horas jugando al tenis con su consola Wii. En ambos casos, la receta fue la misma: ibuprofeno y alejarse de los videojuegos por un tiempo.
Sin embargo el nacimiento de estos trastornos podría remontarse a 1981, cuando se habló de la “muñeca de Space Invaders”, dolor causado por apretar el botón requerido por el popular videojuego.
Si querés mantenerte alejada de estas estadísticas, es mejor que moderes el tiempo que pasás en Whatsapp.