Madonna y Donatella Versace trasladaron su amistad al plano profesional una vez más, uniéndose para dar forma a la campaña de primavera de la firma dirigida por la italiana.
Desafiante, sexy y con una imagen rejuvenecida -por no decir con demasiado photoshop-, Madonna se convierte en la protagonista de esta temporada de la casa de modas italiana. Unas fotos en blanco y negro realizadas por dos de los fotógrafos de moda más exitosos del momento, Mert Alas y Marcus Piggott, han vuelto a hacer brillar a la chica material.
A sus 56 años, la cantante conserva un físico envidiable, fruto de horas de entrenamiento y, como ha confesado en numerosas ocasiones, una dieta sana y equilibrada. Sin embargo, y viendo el resultado de esta sesión fotográfica, hay quien critica un exceso de retoques que han hecho retroceder su imagen a la Madonna de hace 20 años.
La estrecha relación que existe entre la cantante y Versace viene de tiempo atrás. Además de ser fiel seguidora de sus creaciones (tanto como de las de Jean Paul Gaultier), Madonna ha protagonizado otras tres campañas para la casa italiana, la primera en 1995.
Donatella se ha mostrado encantada con esta nueva colaboración y ha asegurado que es un honor poder contar con una de las artistas más poderosas del mundo.
“Madonna es uno de los verdaderos íconos de nuestra firma”, dijo la directora creativa. “Estoy feliz por tener a mi amiga y además una de las artistas más poderosas del mundo, como el rostro de la campaña de Versace”.