Cada bizcocho tiene su propio sabor gracias a sus ingredientes y método de preparación. En esta ocasión te sugerimos una receta ideal para un cumpleaños o algún otro acontecimiento.
El bizcocho es un tipo de masa empleada en la repostería para elaborar tartas, tortas y pasteles esponjosos. Los ingredientes básicos son la harina, huevos, azúcar o sal.
Existen innumerables recetas deliciosas de bizcocho que además de ser fáciles, son económicas.
Esta receta del blog de la web El País, tiene ingredientes como el yogur, mango y castaña, ricas en vitaminas. Específicamente el yogur mantiene similar valor nutricional a la leche, con proteínas, calcio, vitamina A, B, D y grasa.
Podés preparar para cumpleaños infantiles y celebraciones informales.
Ingredientes
- 150 gramos de mango deshidratado o 200 de mango fresco pelado y cortado en rodajas
- 75 gramos de castañas de cajú
- 200 gramos de yogur
- 250 gramos de harina
- 120 gramos de azúcar integral de caña
- 80 ml de aceite de girasol u oliva suave
- dos huevos
- una cucharadita de levadura química
- 1/2 cucharadita de bicarbonato sódico
- una cucharada de ron añejo
- una pizca generosa de sal
- Manteca
Preparación
1. Precalentá el horno a 180 grados.
2. Si vas a usar mango seco, poné en una cacerola con agua hirviendo unos cinco minutos, para que se rehidrate ligeramente.
3. Si vas a usar mango fresco, poné en una bandeja de horno cubierta con papel de ídem, secá por unos 15 a 20 minutos en el mismo vigilando que no se queme.
3. Si las castañas de cajú son salados, lavá con abundante agua. Luego cortá en pedacitos pequeños.
4. Mezclá en un bol grande, aceite, yogur, huevo y azúcar, sin batir demasiado. Añadí las castañas y el mango también picado o levemente triturado.
5. En otro bol, mezclá la harina con la levadura, el bicarbonato y la sal.
6. Incorporá a la mezcla anterior, juntá con una espátula haciendo movimientos envolventes, sin trabajar demasiado la masa.
6. Verté la masa en un molde para bizcochos previamente engrasado con manteca.
7. Horneá unos 35 minutos hasta que esté hecho, probá con un cuchillo: si sale limpio, está; si no, horneá cinco minutos más y repetí la operación.
¡Buen provecho!