- mayo 13, 2013
La historia de «Kuré Dumas», quien ha bajado 26 kilos con alimentación adecuada y sin pasar hambre.
Hoy les quiero presentar un caso de un paciente exitoso. Le pedí permiso para publicar su nombre, él es Alfredo Beconi, más conocido como «Kure Dumas», lleva bajado 26 kilos con alimentación adecuada, sin pasar hambre, actividad física y sin pastillas ni cirugía alguna.
-¿Con cuántos kilos iniciaste?
-Cuando inicié el tratamiento tenía 137 kilos.
¿Cuántos kilos llevás bajados?
– 26 kilos bajados.
– ¿Cuáles fueron tus expectativas al llegar a la consulta?
– Cambiar de vida, aprendiendo a comer menos y mejor.
– ¿Qué fue lo que más te costó?
– Lo que más me costó fue dejar de tomar cerveza y comer a la noche en grande.
– ¿Cuál es tu mayor logro según vos? ¿De qué te sentís orgulloso?
– Me siento orgulloso de haber conseguido comer menos, comer más sano sin torturarme y sin privarme de nada, solo achicando las porciones y controlando la frecuencia de comidas y de retomar la actividad física diaria (tenis y pesas 6 veces a la semana).
– ¿Qué aprendiste en todo este tiempo?
– Aprendí que se puede cambiar, que se pueden retomar los hábitos saludables sin matarte de hambre y sin estar tan pendiente de la balanza ni de dietas muy estrictas. que las dietas solas no funcionan, que el tema es cambiar de hábitos.
Este caso es uno solo de muchos otros, y es para que analicemos en que se basa el éxito de un tratamiento y también sirva como motivación para todas aquellas personas que tuvieron varios intentos fallidos o que todavía no lo intentaron.
¿Cuándo decimos que un tratamiento fue exitoso?
El éxito de un tratamiento para adelgazar implica perder el 10% del peso inicial y mantenerlo por lo menos un año, ejemplificando si iniciaste el tratamiento con 100 kilos la idea es perder por lo menos 10 kilos y poder sostener está perdida durante 1 año. Muchas veces el querer bajar rápido y a cualquier costo nos lleva al fracaso una y otra vez. Esto los saben bien las y los gorditos que conocen y probaron todo tipo de dietas. Con cualquiera de ellas se puede bajar de peso. Lo difícil es mantenerse.
Para tener en cuenta:
- Una revisión de investigaciones internacionales publicada el año pasado por la revista American Psychologist concluyó que las dietas hipocalóricas (menos de 1000 calorías diarias) no son efectivas en el largo plazo. El abordaje moderno es ir por etapas. Así, el cuerpo y la mente se adaptan al nuevo estado.
- “Cuanto más restrictiva es la dieta mayor es el deseo”. Por eso, hacer dietas restrictivas en calorías o dietas que sacan nutrientes provoca un aumento de los pensamientos obsesivos con la comida, y con esto se genera un círculo vicioso de prohibiciones y atracones del cual es difícil de salir.
- Según un estudio publicado en American Psychologist, “las dietas muy bajas en calorías no aportan la cantidad de nutrientes necesarios para un buen funcionamiento del organismo”. Y además, “tampoco generan mejoras en los niveles de colesterol, hipertensión o glucosa en sangre”.